Desde Junio del 2007 existe un bloqueo de las dos fronteras de Gaza:  Erez en el norte de la franja hacia Israel y Rafa en el sur de la franja, hacia Egipto.  Ese bloqueo desproporcionado responde al argumento de un castigo colectivo que nadie recuerda que lo motivo. En la practica el bloqueo de la Franja de Gaza consiste en el aislamiento terrestre, aéreo y marítimo impuesto por Israel y Egipto desde 2007.  

 

Un año después de la retirada unilateral de Israel de la Franja de Gaza en 2005, Hamas ganó las elecciones legislativas palestinas e Israel y el Cuarteto sobre el Medio Oriente dejaron de brindar ayuda a la Autoridad Palestina e impusieron sanciones contra dicha Autoridad porque Hamas no estaba de acuerdo con las condiciones para continuar la ayuda: a saber, el reconocimiento de Israel, el rechazo a las acciones violentas y la aceptación de los acuerdos anteriores entre Israel y la Autoridad Palestina. Estas condiciones no son recíprocas, puesto que el reconocimiento a Palestina, el rechazo de las acciones violentas y respeto de los acuerdos, no se han impuesto a Israel.  Resulta sorprendente que como formato habitual, los desacuerdos entre la autoridades locales, en este caso Hamás e Israel, acaben incrementando las sanciones contra la población civil palestina de la Franja. Díganos versión Maquiavelo de la ley del embudo.  

 

En marzo de 2007, Hamas y Fatah formaron un gobierno de unidad encabezado por Ismail Haniya. Poco después, en junio, Hamas tomó el control de la Franja de Gaza y se apoderó de las instituciones gubernamentales y reemplazó a Fatah y otros funcionarios gubernamentales con miembros de su propio partido. Tras la toma de posesión, Egipto e Israel cerraron en gran medida sus cruces fronterizos con Gaza, alegando que Fatah había huido de la Franja y ya no podía brindar seguridad en el lado palestino. ​ Egipto estaba preocupado porque el control de Hamas sobre Gaza podía aumentar la influencia iraní. Abould Gheit Ministro de Asuntos Exteriores de Egipto explicó que abriendo el cruce fronterizo de Rafah se socavaría la legitimidad de la Autoridad Palestina. Así pues hagan lo que hagan los ciudadanos palestinos, siempre debían haber hecho o deseado lo contario a lo que hicieron.

 

Pero estos 16 años de bloqueo por parte de Israel le han permitido analizar cómodamente y evaluar las posibilidades de los recursos energéticos en la llamada Marina de Gaza evaluados en 1 trillón de pies cúbicos de reservas de gas natural y petróleo. La noticia se centra en que ahora los israelís con el 50% de toda la franja de Gaza prácticamente controlada y la  población no masacrada, repatriada hacia el sur de la franja tiene manos libres para poner en marcha su proyecto de construcción de un canal colosal entre Gaza y el canal de Suez. Una mastodóntica  pipe line, estableciendo 2 sub corredores el ya descrito con la mirada puesta en Europa y otro mirando a la india. Eso convertiría a Israel en un jugador central en el mercado global de la energía.

 

Abramos un poco mas el mapa:

1- Israel pasa a controlar el mercado generador y final del proyecto.

2- Israel establece lazos económicos y políticos con los principales vecinos en la zona.  

3- Rusia queda sin posibilidad de recuperación de su mercado tradicional europeo que muy probablemente caiga definitivamente del lado hebreo.

4-India obtiene la energía precisa para acometer su desarrollo y convertirse en la nueva fábrica del mundo sustituyendo China.

5- Los acuerdos de Abraham interrumpidos por la desproporcionada guerra de castigo a Hamas, perdón, a la población palestina que sufre un auténtico genocidio,  pueden seguir su curso y ahora toca firmar con Arabia Saudí. 

6-  Irán y Rusia  son barridos completamente del mapa de los mercados.

7-El nuevo proveedor Europeo sale de Israel, Marina de Gaza, hacia Chipre, Grecia e Italia.  Toda la operación supone el resurgir de una nueva hegemonía en el mundo de la energía para los próximos 30 años, si aguantamos entre todos visto el despelote que vivimos. 

 

Se lo recuerdo por si ya lo habían olvidado,  todo empezó el 7 de octubre en una fiesta rave  a 4 kilómetros de Gaza, con jóvenes de medio mundo bailando por la paz a altas horas de la madrugada, entre dormidos y despiertos, entre la noche y el alba, entre una cosa y la otra.  Entre lo que creímos ver y entender y lo que realmente está sucediendo. Max Planck, el fundador de la teoría quántica, sabe la respuesta. Deberé escaparme al Max-Planck-Institut de Múnich sin demora, para que los amigos científicos Fernando Comeron y compañía  me expliquen la ley espectral de la radiación del cuerpo negro.