Publicado el 3 de marzo a las 10:12
Hola devoradores de delicatessen con forma de VHS. ¿Qué tal fue vuestra cinéfila semana?
Quiero recordarles que, en este singular y estrafalario mundo, los días, son buenos, regulares, malos o sacados directamente de la cabeza de Wes Craven , elaborando el último slasher neo-post modernista, donde Kafka y Takeshi Kitano unen sus fuerzas para crear algo tan retorcido que solo David Lynch podría descifrarlo.
Esta semana se estrena la sexta entrega de la saga Scream y para celebrarlo de la manera más adecuada, que mejor manera que hablar sobre el género de terror y mas concretamente sobre su vertiente slasher que ha sido una constante en el cine desde la década de 1970.
"Halloween " (1978) y "Viernes 13 " (1980), fueron toda una influencia para los años posteriores, (aunque le deben mucho al Psicosis de Alfred Hitckock) si estás líneas se topan con algún despistado, les explico brevemente, que estás películas se centran principalmente en asesinatos brutales y un asesino en serie que persigue a sus víctimas con un cuchillo. Como pioneras en el género, establecieron muchas bases en su forma que se han mantenido hasta el día de hoy.
Las películas Slasher más modernas, como "Scream " (1996) y "The Cabin in the Woods " (2011), hicieron crecer el género ya que no pusieron tanto el foco en la violencia si no que se centraron en la riqueza psicológica de sus protagonistas y en la deconstrucción del género.
"Scream" dirigida por Wes Craven probablemente sea la que más destaque y la más apreciada por mi, debido a su inteligente guión y a sus personajes bien desarrollados. En lugar de simplemente seguir la fórmula del Slasher, Scream se burla de ella dándole una riqueza inconmensurable. Su secuencia inicial esta tan bien desarrollada, que es inevitable quedarse pasmado viendo la pantalla, por no hablar del atuendo y el impacto que supone ese acierto de máscara que el asesino utiliza para ocultar su identidad, todo un icono que ha permanecido en el imaginario colectivo por años.
Uno de los puntos más satisfactorios de esta saga es todo ese oxígeno cinéfilo que se respira sobre todo en esta primera entrega y su secuela, ya que de forma reiterada hace alusión al género para desdibujarlo y luego dibujarlo de nuevo a través de los diálogos de sus personajes.
Scream marca la diferencia en algo muy específico y eso es la presencia de mujeres fuertes y empoderadas. Antes de que Scream aterrizase en nuestras vidas, las mujeres de estas películas normalmente eran vistas como víctimas y no tenían mucho control sobre su destino, en cambio con Scream y su protagonistas interpretadas por Neve Campbell y Courteney Cox todo cambió. Hoy películas más modernas como "Halloween " (2018) y "Ready or Not " (2019), siguieron esta estela dándonos protagonistas que luchan por su supervivencia con valentía, inteligencia y astucia.
Ghostface aparece como una figura prácticamente vírica , extendiendo lo que representa con múltiples individuos vistiendo sus ropas
Que Scream exista fue gracias a Wes Craven y Kevin Willianson (quien firmó el guion), nos regalaron esta película de terror icónica que ha dejado una huella indeleble en la cultura popular, además está repleta de datos interesantes, que la hacen mucho más interesante.
La película fue filmada en Santa Rosa, California, en lugar de en la ficticia ciudad de Woodsboro, donde tiene lugar la historia.
La máscara que usa el asesino en la película se inspiró en el cuadro "El Grito" de Edvard Munch, y fue creada específicamente para la película por el diseñador de vestuario Brigitte Broch.
El personaje de Sidney Prescott, interpretado por Neve Campbell, se basó en parte en la vida real de Kevin Willianson, quien sufrió la pérdida de su madre a manos de un asesino en serie cuando era adolescente.
La recordada escena inicial en la que Drew Barrymore es asesinada fue filmada en cinco días y requirió de 70 cambios de cámara.
El Slasher está en constante evolución "The Final Girls " (2015), es un buen ejemplo del "Nuevo" Slasher" ya que combina esquemas mas tradicionales con comedia y parodia, muchas de estas películas a día de hoy se ríen del género mientras lo homenajean. (Es más, así se plantearon las secuelas más directas de Scream, cosa que le restó calidad a la saga a mi parecer)
Esta nueva secuela, la número 6, plantea una circunstancia muy interesante y muy propia de Scream en sí mismo. Ya que Ghostface aparece como una figura prácticamente vírica , extendiendo lo que representa con múltiples individuos vistiendo sus ropas , sembrando el terror por una gigantesca jungla de edificios y cemento contextualizando la trama en una gran ciudad, dando situaciones variopintas y muy estimulantes para el espectador, además queridos lectores ver a Jenna Ortega (nuestra adorada Miércoles) en esta película la vuelve doblemente interesante, ya que la intérprete, desprende carisma en cada uno de sus trabajos, además está bien acompañada por algún que otro intérprete de sus anteriores secuelas y las películas originales.
Ahora si me disculpan les tengo que dejar, me dispongo a ponerme mi máscara de Ghostface dirigirme a la cocina, establecer contacto con mi frutero e intentar asustar a la auténtica fruta de los cinéfilos, Banana.