La transexualidad no es nueva, solo estamos descubriéndola, porque con la llegada de los primeros colonizadores con su mirada torpe y estrecha, calumniaron y reprobaron a aquellas personas duales, y a todos los que convivían con ellos con naturalidad y aceptación. 

 

Creo que yo no me siento como ellos, ni ellos, como yo, aunque les llamen mujeres (en el caso de la transición de hombre a mujer), no creo la necesidad de equipararlos, ni de acogerlos en una ley hecha para mujeres, que no recoge su singularidad, ni todas sus expresiones.

 

Los trans son trans, ni hombres ni mujeres, son personas con dualidades y la equiparación a un solo género puede traer problemas. 

 

Una mujer no puede competir, en igualdad de condiciones, con un trans al que se parece, pero que diverge en sus características fisiológicas, casi tanto, como cualquier hombre. 

 

Así llegamos a la noticia de que la luchadora trans Fallon Fox (de la MMA) rompía el cráneo a una mujer en un combate.

 

Es culpa de Fox ? Por supuesto que no, es culpa de una equiparación simplista.

 

Las personas con dos espíritus necesitan su lugar en la sociedad, sin atajos que perjudiquen y molesten a otros, ya tienen bastante con las miradas y el rechazo constante que les persigue desde hace siglos .

 

Ánimo y un abrazo para todos ellos .