El portavoz de Ministerio de Defensa de Rusia, Igor Konashenkov, ha anunciado este jueves "una pausa operativa" en Ucrania, para que las tropas rusas puedan dscansar y restaurar sus capacidades en combate, sin especificar por cuanto se prolongará, ni en qué zonas se llevará a cabo. Sin embargo, el ISW, Instituto para el Estudio de la Guerra, en Estados Unidos, afirma que las hostilidades aún no han cesado y consideran "poco probable que lo hagan".
Konashenkov ha anunciado a través de un comunicado oficial publicado por el Ministerio de Defensa en Rusia, que el país se tomará "una pausa operativa". Esta medida temporal nace de la necesidad de sus tropas de descansar, con el fin de reagrupar fuerzas para una posible nueva ofensiva contra el país vecino. El presidente ruso, Vladimir Putin avisó también este mismo jueves de que "aún no había empezado nada serio" en Ucrania.
"Las unidades que llevaron a cabo misiones de combate durante la 'operación militar especial' están tomando medidas para llenar sus capacidades de combate. Los militares tienen la oportunidad de relajarse, recibir cartas y paquetes desde casa", ha completado Konashenkov en el documento, aunque sin dar muchas explicaciones sobre la duración de esta pausa, ni tampoco en qué zonas del frente se llevará a cabo.
Antes del comunicado oficial ruso, el Instituto para el Estudio de la Guerra, por su parte, adelantó que el Ejército podría haber entrado en pausa, ya que el miércoles, Rusia no reclamó ningún avance territorial por primera vez en los 133 días que lleva de guerra. A pesar de esto, el ISW considera que la actividad hostil no ha frenado y han manifestado a través de su cuenta en la red social Twitter, que es "poco probable" que lo haga: "Las fuerzas rusas todavía han llevado a cabo ofensivas terrestres limitadas y ataques aéreos, de artillería y con misiles en todos los ejes el 7 de julio, y es probable que continúen limitándose a acciones ofensivas a pequeña escala mientras reconstruyen las fuerzas y establecen las condiciones para una ofensiva más significativa".
El bloguero Oleksiy Arestovych declaró en una entrevista que los ataques ucranianos hacia los almacenes rusos podrían haber detonado la decisión para tomarse esta pausa, ya que "debilitaron significativamente la capacidad de hacerlo de manera rápida y organizada. La preparación adicional de la ofensiva en la segunda línea ahora es una tarea no trivial, porque sus reservas están ‘disminuidas’ y disminuirán”. A su vez, se reafirma en que "el ritmo de la ofensiva se ha ralentizado" y que Rusia "se ha tomado un respiro y se aferra a él".