Tras el mal resultado de Ciudadanos en las elecciones de Andalucía, el partido naranja se enfrenta ahora a la complicada tarea de mantenerse a flote para no perder totalmente su representación parlamentaria. Una de las opciones que se baraja por parte del Partido Popular es la de absorber a la formación política, pero de momento los altos cargos de Cs rechazan esa solución.

 

Inés Arrimadas, presidenta del partido desde que dimitió Albert Rivera, ha hecho saber en una entrevista en la cadena Cope que el Partido Popular le ha ofrecido en varias ocasiones pasar a formar parte de sus filas: "Para mí lo fácil sería dimitir o haber aceptado alguno de los tentadores cargos del PP. Si nosotros supiéramos que dimitiendo todos se salva el partido, no tardábamos ni un segundo".

 

Con estas palabras, la diputada parece apostar por seguir luchando por el futuro de su partido. Esta semana ya ha anunciado que comenzará un proceso de renovación y autocrítica para que la gran pérdida de escaños en la Junta de Andalucía no se repita por todo el resto del país en las elecciones municipales que tendrán lugar el año que viene.

Begoña Villacís, vicealcaldesa de la ciudad de Madrid y portavoz de Ciudadanos en la capital, ha aplaudido la decisión de su presidenta. La madrileña ha querido manifestar que Arrimadas "tiene un altísimo sentido de responsabilidad y no afán para ocupar una silla"; y que seguirá trabajando con ella para asegurar un espacio propio de Ciudadanos.

 

Por su parte, Edmundo Bal también rechaza pasar a formar parte del Partido Popular. El diputado ha declarado: "A mí no me vais a ver en el PP". El vicesecretario general de ciudadanos ha afirmado que a él no le ha llegado ninguna oferta por parte del partido azul, y se niega rotundamente a la posibilidad de ser absorbidos por el PP en un futuro.