El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha intervenido en el acto solemne de conmemoración por el 40º aniversario de la adhesión de España a la OTAN, que también ha contado con el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, y varios exsecretarios generales de la organización. Han asistido también representantes de las altas instituciones del Estado, expresidentes del Gobierno y otros miembros del Ejecutivo actual a una celebración que clausurará el Rey Felipe VI.

 

Sánchez ha defendido durante su intervención el aumento de gastos y recursos en Defensa, ante las amenazas que se le presentan a España, para garantizar la seguridad del país. El presidente del Gobierno ha remarcado que es "imprescindible" reforzar las capacidades de disuasión y que "es muy consciente" de que dichas capacidades solo se adquirirán con el aumento en la inversión de Defensa. 

 

El presidente ha querido transmitir que los aliados de la OTAN transmitirán este propósito a sus respectivas sociedades, y que mientras se pone "en jaque" tanto la libertad como el modelo de convivencia pacífica entre naciones, se deberá "hacer ese esfuerzo", ya que es mucho más grave el coste de "quedarse de brazos cruzados". Sánchez ha destacado que tras la guerra de Ucrania, las naciones europeas -entre ellas, España- han empezado a comprender que "la seguridad no está garantizada" indefinidamente, y ha incidido en la importancia de la cooperación entre los miembros de la Alianza, para mantenerla.

 

Sánchez ha remarcado el nuevo concepto estratégico al que se atenderá en las cumbres de la OTAN que se celebrarán en Madrid el 29 y 30 de junio. Un concepto que responderá, no solo a la guerra, sino a las amenazas relacionadas con el cambio climático. "Ese concepto va a ir mucho más allá", ha señalado.