El Estado de Oklahoma (EEUU) ha llevado adelante con 73 votos a favor y 16 en contra un proyecto de ley del aborto que será una de las más restrictivas hasta la fecha. El texto de la norma indica que el aborto estará prohibido desde el momento de la concepción, incluyendo castigos a la venta de la pastilla del día de después u otros anticonceptivos de emergencia. para que la ley entre en vigor, tiene que ser firmada por el gobernador del estado, el republicano Kevin Stitt.

El objetivo de la nueva ley es prohibir por completo la práctica del aborto en todo el territorio del estado de Oklahoma, eliminando anteriores excepciones como los casos de violación o de incesto. Cualquier persona que participe en un aborto sea cual sea la circunstancia podrá enfrentarse a multas y a penas de hasta diez años de cárcel.

 

Después de que el Tribunal Supremo dictara que Texas podía publicar su propia Ley del Aborto a nivel estatal, han sido muchos los estados gobernados por el partido republicano que han aprovechado para endurecer las sanciones a la interrupción del embarazo. Esto ha desencadenado un gran número de manifestaciones para defender el derecho al aborto.

Kamala Harris, vicepresidenta demócrata de Estados Unidos, ha condenado duramente el proyecto del ley de Oklahoma. Se ha referido al texto legal como un ataque directo a las mujeres por parte de legisladores extremistas. Harris ha recalcado la importancia de votar a líderes que estén a favor del aborto, tanto a nivel local como a nivel federal.

 

Según un estudio de Pew Research Center, la mayoría de los ciudadanos de Estados Unidos están a favor del aborto. Un 61% del total de los estadounidenses se posiciona totalmente a favor, un 29% apoya la interrupción del embarazo solo en algunos casos especiales y un 8% de la población del país está totalmente en contra y aboga por la prohibición total del aborto.