José Luis Martínez Almeida, alcalde de Madrid, continúa echando balones fuera ante el escándalo que le relaciona con los comisionistas de las mascarillas, Alberto Luceño y Luis Medina, en los momentos más duros de la pandemia. Varias han sido las contradicciones del alcalde madrileño. 

 

Primera, el contacto con Luis Medina que sostuvo no tener pero que el propio Medina desmiente; segunda, el papel de su primo, negó cualquier intermediación para después reconocer que estaba implicado; tercera, negar que conociera los hechos antes de marzo de 2022 pero, y con ello cuarta contradicción, haber hecho una carta de recomendación para Alberto Luceño.

 

Según señala el diario Público, el exportavoz nacional del PP decidió avalar la profesionalidad de Alberto Luceño como intermediario ante las autoridades asiáticas por una carta escrita en castellano e inglés. Sin embargo, esta misiva, con fecha del 23 de marzo, no fue presentada por el Ayuntamiento ante la Fiscalía.

 

El documento, una especie de carta de recomendación, indicaba al gobierno chino que el empresario ejercía como intermediario de la empresa malasia Leno. Su existencia fue corroborada ante el fiscal en marzo de 2021 por Elena Collado, la persona que centralizaba las compras de material, quien explicó que Luceño pidió la carta “por si tenían problemas en la fabricación”.

 

Alberto Luceño está imputado por recibir cinco millones de euros como comisión por vender al Consistorio tres lotes de material sanitario defectuoso en plena pandemia del coronavirus. Junto con Luis Medina Abascal, también imputado, inflaron el precio de mascarillas, guantes y test defectuosos, y aprovecharon su amistad con Carlos Martínez-Almeida, primo del alcalde, para obtener las millonarias comisiones, según describe la querella de la Fiscalía Anticorrupción tras una investigación que desveló elDiario.es.