El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha advertido este lunes de una posible ofensiva en la región del Donbás tras la concentración de tropas rusas en la zona este de Ucrania. Además, ha confirmado la aprobación de elevar la financiación del envío de armas a Ucrania por parte de la UE
El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha alertado sobre un posible ataque en la región del Donbás ante la concentración de tropas rusas en la zona este de Ucrania.
"Las tropas rusas están concentrándose en el este para lanzar un ataque contra el Donbás. Me temo que la guerra los próximos días va a incrementar en el Donbás", ha advertido antes de la reunión del Consejo de Asuntos Exteriores celebrado en Luxemburgo.
Borrell ha insistido en el apoyo de la Unión Europea a Ucrania, asegurando que las guerras "se ganan y pierden" en el campo de batalla. Por ello, la UE ha aprobado aumentar la financiación del envío de armas hasta los 1.500 millones y los aliados de la OTAN están en busca de formas de hacer llegar tanques a Ucrania.
"Me temo que la guerra los próximos días va a incrementar en el Donbás" - Josep Borrell
Respecto a las sanciones al gas y petróleo ruso, el Alto Representante ha destacado como "todas las sanciones están encima de la mesa".
"Discutir de Ucrania es discutir de la efectividad de las sanciones aplicadas hasta ahora y los ministros estudiarán también los siguientes pasos", ha apuntado.
Borrell ve inevitable la adopción de sanciones en el ámbito energético y así lo aseguró la semana pasada: "Antes o después, espero que antes, esto pasará".
Este asunto pone en peligro la unidad que había mantenido la UE hasta ahora ya que estas medidas no cuentan con el respaldo unánime de los Veintisiete. Ciertos países se muestran reticentes a adoptar estas sanciones como Alemania y Austria, que rechazan cortar de forma inmediata el suministro, o Hungría, que amenaza con vetar cualquier embargo energético defendiendo su interés nacional.
Las opciones que tiene la UE encima de la mesa pasan por imponer aranceles a las energías o pagar los suministros por medio de un fidecomiso, aunque en las reuniones las propuestas aún no están cerradas y queda lejos el consenso necesario para llevarlas a cabo.