El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha avanzado el debate del próximo lunes en el que los ministros de Exteriores abordarán las posibles sanciones al gas y el petróleo ruso en el Consejo de Asuntos Exteriores, una medida que tendrá que adoptarse "antes o después" y que sería la de mayor impacto económico en Rusia
El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha adelantado el debate del próximo lunes del Consejo de Asuntos Exteriores en el que los ministros de ramo tratarán nuevas sanciones al gas y el petróleo ruso.
Mientras se va cerrando la quinta tanda de sanciones europeas por la invasión rusa de Ucrania, donde se incluye el veto al carbón ruso, el caso del gas y el petróleo es, según Borrell, una medida que tendrá que adoptarse "antes o después, espero que antes, esto pasará".
Las declaraciones del jefe de la diplomacia europea están en consonancia con las palabras del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, quien dijo en el Parlamento Europea que las sanciones al gas y el petróleo "serán necesarias tarde o temprano".
Se va cerrando la quinta tanda de sanciones europeas por la invasión rusa de Ucrania, donde se incluye el veto al carbón ruso
Estas supondrían el mayor golpe a la economía rusa, aunque cualquier medida relacionada con ello tendrá que pasar por varios socios europeos reticentes al respecto, como Alemania y Austria, que han rechazado cortar de forma inmediata el gas ruso, o Hungría, que amenaza con vetar cualquier embargo energético.
Por el momento, los Veintisiete siguen ultimando el nuevo paquete de sanciones que, junto al veto a las importaciones de carbón, suma el cierre de los puertos a navíos rusos y añade nuevas restricciones al sector bancario ruso.
Según trasladan fuentes diplomáticas a Europa Press, el embargo al carbón, frente al tema del gas y el petróleo, suscita consenso entre los Estados miembros. Desde Bruselas apuntan a que el embargo del carbón supondrá un impacto de 4.000 millones de euros al año para las arcas rusas, mientras que el golpe del gas y el petróleo sería mucho mayor, representando unos 800 millones al día para Rusia.