La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha señalado que Argelia, a través de la empresa estatal Sonatrach, tiene la intención de subir los precios del gas a España, pero espera que este incremento sea “moderado”.
"La intención de Sonatrach es subir los precios, pero eso viene desde octubre, porque entiende que los precios están muy por debajo del precio al que se cotizaba el gas en los mercados internacionales", ha subrayado Ribera en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press.
La vicepresidenta tercera ha indicado que las negociaciones entre las compañías españolas y la empresa estatal argelina suelen ser largas, aunque confía en que los términos comerciales en los que se fija el precio del gas se cierren “cuanto antes”.
Cuestionada sobre si la postura del Ejecutivo sobre el Sáhara Occidental puede perjudicar el suministro de gas procedente de Argelia, Ribera ha asegurado que para el Gobierno es esencial una “excelente relación” con Marruecos como con Argelia, a la vez que lamenta que la relación entre estas dos naciones no sea buena.
"La relación con Argelia, que es un país fiable, que cumple con sus compromisos, nos parece que está asegurada en este extremo del suministro de gas en las necesidades y en los términos que viene comprando España desde hace mucho", expresa la vicepresidenta, que transmite la confianza “total” de España en que el país africano cumpla sus compromisos.
El pasado octubre se inició la revisión de precios del gas entre Sonatrach y las energéticas españolas, una operación entre compañías y no entre gobiernos, según ha confirmado Ribera. “Alguna de nuestras compañías gasistas denunció unilateralmente los contratos de gas que tenía con algunas empresas industriales”, pero apunta que, aunque no fue como ellos desearían, como Gobierno no podían intervenir.