Hoy se ha inaugurado la 17º edición del Mobile World Congress, una feria internacional tecnológica que se celebra en las instalaciones de Fira Barcelona y a la que acudirán más de 1500 empresas. Tras la cancelación de la edición en 2020 y la versión reducida en 2021 por el Covid-19, John Hoffman (Consejero delegado de la GSMA, empresa organizadora de la feria) declara: “Todo el ecosistema volverá otra vez a Barcelona. Va a ser un encuentro genial, este será un show muy físico”.
El lema principal del congreso de este año, `Conectividad desencadenada´, hace referencia a las novedades protagonistas de este año. Algunas de ellas son la conexión 5G, el internet de las cosas (elementos cotidianos conectados entre sí), la computación en la nube, el emprendimiento y la realidad virtual.
José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica y de la GSMA, manifiesta que estas novedades harán que la tecnología tenga un mayor protagonismo en la vida de los ciudadanos, llevándolos a vivir una experiencia tecnológica totalmente inmersiva.
A la vez, Pallete ha mostrado su compromiso con la reducción de la huella ambiental de la industria tecnológica, altamente contaminante, y ha abierto un debate presente en la sociedad, el de la ética y solidaridad: "La tecnología no tiene ética y debemos aplicar principios para hacer el bien, la sociedad ha perdido la fe y debemos devolvérsela". Asimismo, Nick Read, consejero delegado de Vodafone, ha mostrado su interés en llevar la tecnología a países en vías de desarrollo: "El móvil es el único dispositivo que les permite acceso a internet y es básico dar herramientas para asegurar la conectividad y la transferencia de servicios financieros".
El congreso generará en Barcelona un impacto de 240 millones de euros y 6.700 puestos temporales, el sector hotelero cuenta con 10.000 reservas relacionadas con este.