Los representantes de la Cámara Baja han tumbado, casi de forma unánime, una iniciativa presentada por el partido de ultraderecha, en la que recomiendan medidas como el fomento de la natalidad, apoyo a la familia y los jóvenes, para luchar contra la despoblación, similares a las que se aplican en países como Polonia y Hungría.
La moción ha contado con el apoyo completo de la bancada de Vox, 52 diputados, y denegada por casi la totalidad del resto de grupos, con 284 votos en contra y una abstención.
Según el texto presentado, la formación incide en la necesidad de crear, como en Polonia y Hungría, sistemas de respaldo a la familia que agrupen medidas institucionales tributarias, sociales, laborales y de concienciación social para revertir la despoblación rural. En principio, estas medidas podrían considerarse apropiadas, pero el barniz nacionalista que le da la ultraderecha, sitúa estas peticiones cerca de postulados racistas. Los de Vox consideran que hay que priorizar a las familias españolas y descartar, por ejemplo, a la población inmigrante levantando una legislación dura que haga casi imposible vivir en España si no se tiene ese pedigrí de españolidad que defiende la extrema derecha.
El paquete de medidas estaba dirigido a apoyar la maternidad, la conciliación laboral en los entornos rurales, así como facilitar fiscalmente a las familias que tengan hijos. Las formaciones del Congreso, aún con la resaca electoral de las elecciones de Castilla y León, tachan estas iniciativas de populistas y algunos acusan al partido de Santiago Abascal de incluir sus postulados en esta moción.
Vox pretendía forzar al Ejecutivo a abandonar las bases de la Agenda 2030, “incompatibles”, apuntan, con la defensa de los intereses de los españoles.
"Solo quieren abordar este problema desde las políticas de natalidad, y se trata de romper la brecha entre la España urbana y la España rural", expresaba Carmen Navarro, diputada del PP, especialmente crítica con el texto, indicando que está lleno de “generalidades”, mientras exclama que su partido lleva años combatiendo la despoblación en el territorio castellanoleonés.
Desde Ciudadanos recriminan que pongan como ejemplo a naciones como Polonia y Hungría en una moción “vacía de contenido” y los socialistas defienden la acción del presidente del Gobierno para luchar contra el problema demográfico. Los partidos independentistas lamentaban el “debate partidista” de la situación poblacional, y critican que se realice un “acto electoral”.