El líder del Partido Socialista de Madrid, Juan Lobato, tan solo lleva tres meses en el cargo desde que le ganara las primarias de su partido al alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala. Pero no ha perdido el tiempo. Ha renovado los cargos orgánicos de la formación en un Congreso Regional que califica de "exitoso" y ha puesto en marcha nuevos instrumentos de participación y transparencia con el objetivo de "relanzar el proyecto socialista" y volver a conectar con la sociedad madrileña. El fracaso de la última convocatoria electoral obligaba esos cambios y el tiempo escasea ya que las próximas elecciones están a poco más de un año vista. Por eso, los nuevos gestores socialistas no han perdido el tiempo y ya funcionan sus Espacios Abiertos de Participación, su nuevo consejo de alcaldes, alcaldesas y portavoces, la nueva agrupación Madrid Ciudad, y sus encuentros territoriales con la militancia. 

 

Juan Lobato, tras el parón navideño, ejercerá una oposición contundente y "propositiva" en la reanudación de la actividad parlamentaria en la Asamblea de Madrid y así se lo hará saber este martes a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso. La intención del líder socialista en dejar de lado la confrontación, la polarización, el enfrentamiento directo y su actitud en la oposición será de "fiscalización contundente" para a continuación "ofrecer nuestras soluciones". 

 

En el encuentro de hoy, Lobato lleva tres  ofertas de pactos para firmar con la presidenta de la Comunidad. Así lo explicó ayer en su participación en el Foro de la Nueva Economía, y también en una entrevista con nuestro periódico La Hora Digital que publicamos hoy. Se trata de acuerdos sobre los fondos europeos, sobre la salud de los madrileños y un último que se centra en la generación de jóvenes entre 20 y 40 años.

 

El primero de los pactos que ofrecerá Lobato a Isabel Díaz Ayuso tiene que ver con los fondos de recuperación europeos que están llegando a la Comunidad.  El líder socialista propone crear una oficina en la que participen municipios, empresas, sindicatos y el resto de las fuerzas políticas. El objetivo sería "consensuar, coordinar y fiscalizar la gestión de esos fondos en Madrid". Lobato afirmó ayer que "necesitamos aprovechar al máximo y cuanto antes los fondos europeos que la unión Europea y el Gobierno de España están suministrando a Madrid. Más de 1.200 millones han llegado ya a la región". El dirigente madrileño abogó por alejarse de polémicas y "recursos para titulares" sobre una cuestión que resulta transcendental para nuestro país. Justo lo contrario a lo que hace el Gobierno regional que hace unas semanas anunció la presentación en el Tribunal Supremo de un recurso en el que acusa al Gobierno de España de repartir esos fondos de manera arbitraria. Esa 'cruzada' contra la gestión de los fondos la han llevado los populares a Bruselas. La respuesta que han obtenido de Europa es de total indiferencia. Saben las autoridades comunitarias que los controles son tan férreos y tan exhaustivos que es imposible que haya problema alguno con las subvenciones millonarias que irá recibiendo España a medida que cumpla los hitos que marca su excelente Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

 

El segundo pacto que ofrecerá Lobato tiene que ver con la Sanidad y el sistema sanitario madrileño, muy golpeado por la pandemia del coronavirus. Los socialistas quieren firmar un documento con la presidenta regional en el que piden cuestiones básicas como que haya un límite máximo de 48 horas para que los ciudadanos sean atendidos en Atención Primaria, para que en menos de 15 días el paciente que lo necesite pueda ser atendido por un especialista o que, en caso de operación, no pasen más de tres meses hasta poder entrar en un quirófano. 

 

El tercer pacto estaría destinado a recuperar a la generación de entre 20 y 40 años, la que ha sufrido ya las consecuencias de la crisis económica del 2008 y que ahora le toca sufrir de nuevo la crisis producida por la pandemia del coronavirus. Se trata de jóvenes que tras terminar sus estudios están en la precariedad laboral, que no pueden acceder a una vivienda digna, que sufren bajos sueldos y que, muchos de ellos, desencantados por la situación actual, terminan por emigrar para buscar las oportunidades que aquí se les niega.  Como soluciones, Lobato propone una política de vivienda que ofrezca un amplio parque de vivienda pública, un suplemento de 100 euros al Bono Joven de Alquiler del Gobierno de 250 euros, medidas para la natalidad o para la conciliación familiar, entre otras.

 

En opinión de Juan Lobato, son "tres pactos viable y sensatos y que no pueden esperar estos 16 meses hasta las elecciones sino que tienen que ponerse en marcha ya".