Publicado el 13 de enero a las 12:51
Salvar las brecha social y económica sigue siendo la gran asignatura pendiente de una educación digital que llegaba con la pandemia para quedarse, pues es una de las principales apuestas para la enseñanza del futuro. Ese es el firme propósito del ministerio encabezado por una Pilar Alegría que asistía a la jornada sobre 'La adaptación escolar a la cultura digital: la asignatura pendiente' organizada por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) y BBVA, sumándose a la apuesta por la realidad digital en la educación, pero sin olvidar a nadie por el camino. Precisamente, en este encuentro quedaba nuevamente de manifiesto con la exposición de los resultados de una encuesta realizada a alumnado de 14 a 18 años que el ambiente familiar y las condiciones del hogar continúan siendo los principales escollos que presenta la educación digital para su definitiva implementación.
La educación híbrida online-presencial a la que obligaba la pandemia dejaba tras de sí una muy buena oportunidad para comprobar la adaptación de los estudiantes de diferentes perfiles socioeconómicos a la enseñanza digital . Para ello, y encuadrada en el proyecto educativo conjunto de BBVA y Fad, en junio de 2021 se realizaban un total de 612 encuestas a jóvenes entre 14 y 18 años que reflejaban que la educación digital va por el buen camino, pero aún posee un importante margen de mejora. En esta línea, un 47,2% del alumnado que completaba la encuesta coincidía en afirmar que pudo continuar con los estudios online "bien", aunque "con algunas dificultades". Más o menos obstáculos se han encontrado un 68,1% de los encuestados por tan solo un 28,1% que asegura haber seguido "perfectamente" sus estudios mediante la modalidad online.
Pilar Alegría: "Una cosa que me preocupa es cómo atendemos a esa realidad, a esa revolución digital que ha llegado a nuestras aulas, sin que esto acentúe las diferencias y los sesgos"
La educación online exige más constancia y cuenta con una sobrecarga de trabajo mayor, pero proporciona más libertad y comodidad
El curso 2020-2021 se cerró como el mejor 'entrenamiento' para estudiar la adaptación del alumnado a la educación telemática y deja interesantes apreciaciones por parte de los estudiantes. Así, de la misma encuesta se desprendía que la enseñanza online exige una más constancia en el estudio sumado a una sobrecarga de trabajo mayor dentro del capítulo de dificultades más comúnmente reseñadas por los estudiantes. Sin embargo, y como principales ventajas a esta modalidad, los encuestados aludían a la disposición de una mayor libertad para organizar las propias tareas así como la comodidad que ofrece . Otro aspecto que ha salido a relucir en esta investigación es la tendencia autodidacta que impulsa , pues un 22,9% de quienes experimentaron problemas afirma que no pidió ayuda a nadie, y el 46,6% de quienes no pidieron ayuda buscaron la información en internet. Datos esperanzadores que refuerzan la apuesta de Alegría por la educación digital, pero con muchas dificultades aún por resolver con el impacto de la brecha social y económica como las más complejas.