La exministra de Educación y Formación Profesional Isabel Celaá ha sido propuesta como la nueva embajadora ante El Vaticano, según confirman fuentes gubernamentales. El Gobierno ha pedido ya el plácet (visto bueno del país anfitrión) para Celaá y está a la espera de que se completen los trámites diplomáticos para hacer oficial su nombramiento. La agenda de la futura responsable incluirá labores como la resignificación del Valle de los Caídos y una posible visita del Papa a España.
Isabel Celaá salió del Gobierno en la remodelación del verano pasado, tras haber ostentado el cargo de ministra de Educación y Formación Profesional durante tres años, desde junio de 2018, cuando triunfó la moción de censura presentada por el PSOE. En el primer gobierno de Pedro Sánchez fue también portavoz del Gobierno. Celaá sustituirá ahora en la embajada en el Vaticano a la diplomática María del Carmen de la Peña, nombrada en octubre de 2018.
Según fuentes gubernamentales, el nombramiento de Celaá ha sido una decisión personal del presidente Pedro Sánchez. Se trata del segundo exministro que Sánchez pone al frente de una Embajada, ya que en octubre el extitular de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, fue nombrado embajador ante la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Nueva agenda
Como responsable de Educación, Celaá fue la encargada de sacar adelante la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (Lomloe), conmúnmente denominada como Ley Celaá, que elimina la asignatura alternativa a Religión y, aunque mantiene a esta última como evaluable, no puntúa para la nota media del título. Como nueva embajadora ante la Santa Sede, la exministra deberá abordar la aplicación de su propia ley, el destino de los bienes inmatriculados por la Iglesia, el pago del IBI por los inmuebles eclesiásticos que no se dedican al culto o la reforma del Concordato, así como la posibilidad de que el papa Francisco realice en 2022 su primera visita a España.