La ley se basa en once medidas de calado cuyo objetivo es la elaboración de un catálogo de servicios garantizado de las personas demandantes de empleo. Uno de los puntos principales de la nueva ley es la transformación del actual Servicio Público de Empleo (SEPE) en una Agencia Española para el Empleo que, por un lado, sea más eficiente para que el ciudadano pueda encontrar trabajo y, por otro, pueda medir su actividad y el nivel de empleabilidad buscando reorientar sus políticas. Asimismo, desde Trabajo se impulsará la elaboración de un perfil individualizado del usuario que permita, a través de evidencias estadísticas, mejorar su estado laboral.

Este análisis personalizado tendrá en cuenta las habilidades, las competencias, la edad, el ámbito territorial, la pertenencia a un colectivo prioritario, y el tiempo y los motivos del desempleo, entre otras variables. Esto será posible gracias al uso de la inteligencia artificial y la digitalización de las administraciones públicas. Así, la futura Agencia Española para el Empleo se encargará de cruzar estos datos y de garantizar que las herramientas digitales de tratamiento masivo de datos no penalicen a los demandantes de empleo ni introduzcan sesgos involuntarios.

Desde el Ministerio además se maneja una ratio de 7.000 orientadores por cada millón de demandantes de empleo. Estos profesionales se dedicarán a ofrecer itinerarios personalizados adaptados a cada ciudadano. La nueva ley buscará de igual forma el impulso del emprendimiento y el autoempleo mediante una auditoría de viabilidad que analice si los proyectos tienen base para desarrollarse.

 

✅Hoy el #CMin ha aprobado el Anteproyecto de Ley de Empleo.

🔹 El impulso de las políticas de empleo que suponen una transformación de los servicios públicos de empleo y que permitirá una atención de vanguardia. #LeyDeEmpleo (Hilo)👇 pic.twitter.com/63862M7T82

— Ministerio Trabajo y Economía Social (@empleogob) December 3, 2021