Pablo Elorduy, redactor de El Salto Digital.
Desde el pasado viernes 19 de noviembre, los lectores que quieran entrar en el periódico El Salto Digital no lo pueden hacer ya que el medio está sufriendo un intenso y grave ataque informático. No es el único medio al que le ocurre ya que las webs de La Marea o La Última Hora tambien están afectadas. Se trata de un ataque a la libertad de Prensa y también una forma 'moderna' de acallar determinadas ideas.
El redactor y miembro del equipo fundacional de El Salto Digital , Pablo Elorduy , nos ha detallado cómo están sufriendo desde hace unos días "miles de peticiones simultáneas a la web de robots" que forman parte de este ciberataque y que hacen que su servidor se sature. Como consecuencia de ello, los lectores habituales del periódico no pueden acceder a la web o no pueden hacerlo con normalidad. Además, los propios redactores están sufriendo la imposibilidad de editar sus artículos diarios lo que supone "muchas horas perdidas, mucho trabajo perdido y vamos a ver cómo se resuelve en los próximos días".
El Salto Digital , o La Marea o La Última Hora sufran estos ciberataques en el fin de semana del 20-N en el que sectores de ultraderecha han recordado y han exaltado al régimen franquista. Se trata de periódicos con una línea ideológica de izquierdas y, aunque cuesta mucho probar nada, la sospecha es clara. Para Pablo Elorduy "no tenemos pruebas suficientes, pero se tendrá que investigar" "los precedentes son malos y en realidad es difícil saber de donde provienen los ataques" . "Tenemos claro que hay un componente político. Más allá de nuestra ideología o posicionamiento estamos hablando de un ataque a la Libertad de Expresión en genérico y por ese lado hemos recibido la solidaridad de medios que se consideran conservadores" "estamos viviendo un ataque a uno de los pilares de la democracia como es la libertad de Prensa o la libertad de información"
Además, incide en que este tipo de ciberataques tienen un coste económico que no parece fácil sostenerlo durante mucho tiempo por lo que cree que "hay alguien que está financiando que una o varias personas estén utilizando unas máquinas que (...) usadas durante todo este tiempo tiene un volumen importante de dinero".
Otro problema que supone estos episodios de ataques informáticos tienen un claro perjuicio económico. Elorduy explica que "estamos perdiendo mucho tiempo y muchos recursos. Hay un coste de oportunidad de todas las personas que nos conocerían estos días y podrían aportar al proyecto, pero también perdemos anunciantes y en términos de conocimiento de marca".
"Lo económico y lo político siempre está muy ligado, a nosotros el coste nos afecta a nuestras vidas porque hablamos de 20 personas en plantilla que si sigue el ataque tendrá problemas para cobrar sus sueldos y eventualmente podría llevar al cierre del medio de comunicación, aunque ahora no estamos en esa perspectiva".
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