Garzón ha explicado, durante su intervención en la mesa 'Consumo sostenible y sistemas alimentarios justos' celebrada en el marco de la 'Universidad de Otoño de Podemos en la localidad madrileña de Rivas, que estas reacciones de oposición provienen de rincones conservadores. A estos ha calificado de "negacionistas de facto" sobre el cambio climático, pues "ignoran" las alternativas para combatir la crisis ecosocial en la que España se ve sumergida.

Durante sus declaraciones, el ministro ha expuesto que el modelo de producción de alimentos y consumo poblacional actual fomenta un impacto severo, tanto en las relaciones sociales como en el planeta. Unos efectos con triple calado, pues inciden en la "pérdida de biodiversidad, contaminación y cambio climático".

Fue hace unos meses cuando el ministro de Consumo abría el debate acerca del consumo masivo de carne roja en España. Garzón explicaba que esta situación incontrolable tenía efectos sobre el medio ambiente, la salud y la economía del país. "Si redujésemos el consumo de carne hasta los niveles recomendados por la ciencia, se evitarían: El 50% de las emisiones de gases invernadero asociadas a la alimentación y el 20% de las muertes prematuras", expresaba el ministro a través de Twitter.

Las declaraciones del coordinador de IU desataron la polémica, especialmente entre los sectores de hostelería e industrias cárnicas, aunque también de destacados presidente autonómicos como los de Castilla-La Mancha o Extremadura. Asimismo, el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, declaraba que "un buen chuletón es insuperable".