La Comisión Europea y el Gobierno de Reino Unido se reunirán el próximo lunes 11 de octubre para abrir las negociaciones acerca de las relaciones entre la la UE y Gibraltar. Este territorio no funciona bajo el acuerdo del Brexit, por lo que Europa mantiene su propuesta de descartar la Verja para que España controle el paso fronterizo del aeropuerto y el puerto del Peñón, junto con el apoyo de Frontex. Los encargados de las conversaciones serán Maros Sefcovic, vicepresidente de la Comisión responsable de las relaciones con los británicos y Liz Truss, nueva ministra de Exteriores de Reino Unido.
La primera tanda de diálogo comenzará el lunes en Bruselas, según ha informado el propio Sefcovic a través de un comunicado en el que también señala en que confía en que las negociaciones serán constructivas. Se sentarán alrededor de la mesa tanto la UE como la nación inglesa, aunque fuentes afirman que España estará "vinculada estrechamente" en las conversaciones. Además, Gibraltar ha confirmado que su ministro principal, Fabian Picardo, y sus asesores estarán "muy involucrados en las próximas semanas y meses" para coordinar con el Gobierno británico el resultado de la negociación.
Por su parte, la ministra de Exteriores británica se ha dirigido a su perfil de Twitter para exponer que desde Reino Unido están "decididos a trabajar para un Tratado en línea con el marco acordado con España". Asimismo, Truss ha indicado que su país permanecerá "firme" en su apoyo a Gibraltar y "no aceptará nada que comprometa la soberanía".
El acuerdo de diciembre
Tanto España como Reino Unido acordaron en diciembre de 2020 un pacto interino para Gibraltar de cara a la consumación del Brexit en ese mismo enero, sin haber definido previa ni concretamente un marco para la relación del territorio con la Unión Europea. España expresó que el acuerdo había sido satisfecho para suprimir barreras terrestres y confirmar el control de las entradas y salidas por el aeropuerto y puerto de Gibraltar por parte de los agentes de la Agencia europea de control de Fronteras.
La Comisión Europea, por su parte, dejó exclusivamente en manos de las autoridades españolas la responsabilidad de controlar esos pasos si se dejaba caer la Verja, algo que no gustó al Ejecutivo inglés de Boris Johnson, que tildó esa puntualización de "inaceptable".
El mandato definitivo que se adoptó hace una semana incluyó el matiz de que España ha expresado su "interés" por solicitar a la agencia Frontex la asistencia para esa tarea durante un periodo inicial de cuatro años.