El debate de la Unión, que marca el inicio del curso político en el seno de la Unión Europea, tiene lugar este miércoles. Los representantes parlamentarios se reunirán con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, para juzgar el trabajo realizado por la CE durante el anterior curso y si los planes de futuro del órgano se ajustan a las preocupaciones de la ciudadanía europea. Durante esta semana también se debatirá en Bruselas sobre las acciones que la UE debe emprender en relación a la crisis de Afganistán, las relaciones de la Unión con Rusia y el reparto de la Reserva de Adaptación al Brexit.
Este miércoles tiene lugar el debate anual sobre el estado de la Unión que inaugura el comienzo del curso político en la que el Parlamento Europeo analiza el trabajo realizado por la Comisión Europea durante el año anterior y las perspectivas de futuro. La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, se ha dirigido a los eurodiputados para presentar el trabajo de la Comisión en relación a la crisis sanitaria y económica, las principales preocupaciones de los ciudadanos europeos durante el año pasado. Además, en su discurso ha explicado los planes y visiones de futuro de la institución.
Durante esta cita, la Comisión rendirá cuentas ante el Parlamento Europeo, que es la única institución de la Unión Europea en la que los miembros son elegidos directamente por los ciudadanos. En su discurso de apertura, von der Leyen ha asegurado que las prioridades presentadas el año pasado siguen siendo útiles para hacer frente a los retos actuales: la UE seguirá trabajando para combatir la pandemia del coronavirus y pondrá el foco en la recuperación económica y social. Del mismo modo, ha reiterado su compromiso con el Pacto Verde Europeo y la Estrategia Digital.
La presidenta ha enumerado también las acciones que la Comisión quiere emprender el próximo año para cumplir sus objetivos:
- Proseguir con los esfuerzos de vacunación en Europa y acelerar la vacunación a escala mundial
- Colaborar con socios mundiales para financiar la lucha contra el cambio climático
- Liderar la transformación digital
- Mejorar las condiciones de trabajo y asistencia sanitaria, sobre todo en relación a los jóvenes europeos
- Intensificar la cooperación en materia de seguridad y defensa
- Defender los valores y libertades europeos y el Estado de Derecho
El pasado martes, el pleno debatió con el jefe de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, la respuesta que Europa debe dar a la crisis migratoria y humanitaria en Afganistán
Además del debate, el Parlamento Europeo tiene otras citas de vital importancia a lo largo de esta semana. El pasado martes, el pleno debatió con el jefe de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, la respuesta que Europa debe dar a la crisis migratoria y humanitaria en Afganistán. La resolución final se votará el próximo jueves.
También se abordó en el pleno las posibles formas en las que deben avanzar las relaciones entre la UE y Rusia. Se llegó a la conclusión de que es necesario reformar la política exterior de la organización para mostrar su capacidad de actuar y tomar decisiones, ampliando las competencias del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE). La UE, la OTAN y los socios internacionales deben reforzar sus capacidades de defensa para disuadir a Rusia de intervenir en las vecindades orientales de la UE y lograr mantener la paz y estabilidad en la región. Del mismo modo, se reiteró la necesidad de cumplir los compromisos en materia colectiva acordados con la OTAN.
En relación con la instauración de una sociedad democrática en el país, se acordó llevar a cabo un diálogo selectivo con el Kremlin para preparar su transición y favorecer la democracia mediante sanciones, controles financieros e investigaciones internacionales.
Este miércoles, los eurodiputados adoptarán la Reserva de Adaptación al Brexit, un fondo europeo que servirá para apoyar a las personas, empresas y países miembros de la UE más afectados por la salida de Reino Unido de la UE. Con este fondo se espera poder mitigar el efecto económico, social y territorial del Brexit. Se espera que comience a repartirse en diciembre entre los países miembros y cubrirá los gastos hasta 2025. El método de asignación se basa en la importancia del comercio con Reino Unido, el valor del pescado capturado en su zona económica exclusiva y la población de las regiones marítimas fronterizas con Reino Unido.
