No era oficial, pero ya se intuía: el gobierno talibán ha prohibido a las afganas realizar deporte. Se confirma así una regresión en los derechos de las mujeres equiparable a la que ya sufrieron en la primera etapa de mandato talibán entre los años 1996 y 2001. El subjefe de la comisión cultural de los talibanes, Ahmadullah Wasiq, hablaba para la emisora australiana SBS catalogando de "no necesario" el deporte femenino. Cae de este modo, un derecho más para las mujeres en Afganistán que están viendo cómo, con la llegada de los talibanes, se van desvaneciendo uno a uno los logros conseguidos tras tantos años de lucha.
“La práctica de la educación física, la actividad física y el deporte es un derecho fundamental para todos”. Este postulado corresponde el primer artículo de la Carta Internacional de la Educación Física, la Actividad Física y el Deporte de la UNESCO. Por lo pronto, las mujeres de Afganistán han visto cómo este derecho reconocido internacionalmente se desvanece, pese a las promesas iniciales de los talibanes de conformar un gobierno más inclusivo.
La población femenina afgana, sin embargo, pese al terror talibán no va a dejar de pelear por unos derechos que les pertenecen y tanto les había costado conseguir. La primera manifestación ya llegó de manos de las que hasta hace poco han sido empleadas del Gobierno y por activistas por los derechos de las mujeres. Un primer desafío al nuevo régimen talibán que se encuentra ante una protesta inédita en sus anteriores años de mandato. Tal y como anunció una de las activistas que participó, no será esta la única movilización que llevarán a cabo las afganas. Ellas quieren mostrar a los talibanes que no van a doblegarse ante el terror que tratan de infundir y que están dispuestas a hacer todo lo posible para conservar unos derechos que son suyos.
El subjefe de la comisión cultural califica el deporte femenino como "no necesario" porque "expone los cuerpos" de las mujeres a los medios
Tal y como os contamos en La Hora Digital, lo de “inclusivo” se quedó en eso, en una promesa incumplida. El anuncio de los integrantes del nuevo gobierno talibán no hizo más que confirmar que esta etapa va a parecerse y mucho al anterior mandato de este régimen, entre los años 1996 y 2001. Los talibanes han mantenido su núcleo fuerte con Mulá Mohammad, uno de los fundadores del movimiento, como máximo exponente en una lista de nombres donde la diversidad brilla por su ausencia.
La comunidad internacional reticente con los miembros del nuevo gobierno talibán
Las reacciones por parte de la comunidad internacional no se han hecho esperar. Alemania y Estados Unidos mostraron sus impresiones en una reunión de 22 ministros de exteriores y miembros de la OTAN, la ONU y la Unión Europea con unas expectativas del gobierno talibán nada halagüeñas. Heiko Maas, ministro de Asuntos Exteriores alemán, afirmaba que “las noticias procedentes de Afganistán no nos hacen ser optimistas”. Por su parte, Antony Blinken, secretario de Estado estadounidense, añadía que “también nos preocupan el historial y las afiliaciones de algunos de esos individuos”, pues algunos de los integrantes del nuevo gobierno talibán son de los personajes más buscados por la CIA.
Las mujeres ni presentes en el nuevo gobierno talibán ni libres para la práctica de deporte
Las afganas acogían ya con decepción la noticia de que ninguna mujer iba a formar parte del gobierno talibán ante la falsa promesa de inclusión. No obstante, el anuncio oficial de la prohibición de hacer deporte ha supuesto un nuevo revés que confirma que los talibanes siguen siendo lo que eran y las promesas solo una máscara para ocultar la realidad. Justificaba el subjefe de la comisión cultural de los talibanes, Ahmadullah Wasiq, la prohibición de la práctica deportiva a las mujeres afganas porque “exponen sus cuerpos”. Explicación insólita para todo un siglo XXI.