Las zonas rurales en España sufren desde hace años el problema de la despoblación por lo que numerosos pequeños pueblos estan al borde de la desaparición. La gente se va y cada vez hay menos servicios, lo que constituye una pescadilla que se muerde la cola. Las banca cierra las oficinas para atender a sus clientes. Afortunadamente Correos ha acudido en socorro de esta población rural y sustituye muchos de estos servicios, haciendo los carteros como oficina bancaria de depósito y retirada de efectivo, entre otros servicios.
La gente abandona sus lugares de origen para ir a las grandes ciudades donde encontrar más posibilidades de empleo y más servicios, mientras que las compañías van cerrando sus locales. La última en abandonar es la banca, que está cerrando sus oficinas en pueblos pequeños. Afortunadamente la empresa CORREOS, se viene haciendo eco de estas necesidades, y ha habilitado su servicio de carteros para que suplan estas funciones y sirvan como una especie de cajeros automáticos para percibir y entregar abonos a los pocos habitantes que van quedando en estas poblaciones muy pequeñas de nuestra España rural.
Es una de las preocupaciones, también, del Ministerio de Agricultura, que está realizando una serie de campañas para incentivar el regreso y la ocupación del medio rural y agrario. Esta cuestión, es especialmente preocupante en Galicia, donde los nuevos cierres de oficinas bancarias de Abanca está dejando a miles de ciudadanos sin la posibilidad de acceder a dinero en efectivo en su municipio. Alcaldes y vecinos de hasta 45 ayuntamientos realizan protestas y buscar alternativas. Mientras, el presidente Alberto Núñez Feijóo, culpa al gobierno central de no crear una ley que prohíba estos cierres.
Castilla y León, Galicia, Aragón o Andalucía sufren los cierres de las oficinas bancarias, que están dejando a miles de ciudadanos de zonas rurales sin la posibilidad de acceder a un punto de acceso a efectivo en su municipio.
Concretamente, en Galicia el anuncio de los nuevos recortes de oficinas bancarias de Abanca, que afectarán hasta a 10.000 gallegos, ha ocasionado que los alcaldes de las zonas afectadas se agrupen para movilizarse junto a 50.000 ciudadanos de 45 ayuntamientos. El Instituto Gallego de Estadística certifica que a principios de año, la mayor parte de Ourense y A Coruña no disponía de sucursales ni cajeros en sus municipios. Y esta lista se hará más amplia tras la noticia de Abanca.
La sucursal justifica estos cierres determinándolos como una "reorganización" de su red comercial para crear "oficinas más grandes, con más personal, especialización y mejor dotadas desde el punto de vista tecnológico", pero los alcaldes de las zonas afectadas califican esta decisión como una "agresión sin precedentes contra el medio rural".
La entidad Abanca nació de la unión de las cajas de ahorros gallegas, fue impulsada por el gobierno de Alberto Núñez Feijóo y rescatada con 9.000 millones de ayudas públicas. Ahora, son muchos los alcaldes que amenazan con retirar los fondos de esta entidad y pedir a su población que haga lo mismo. Antes de la fusión de las cajas de ahorro, en 2008, Galicia contaba con 2.534 oficinas bancarias, ahora solo disponen de la mitad.
En su intento por resolver el problema, el presidente Feijóo ha ofrecido una ayuda directa de 2,88 millones de euros a la entidad financiera para que establezca cajeros automáticos en las zonas en las que clausure oficinas. Además, el presidente ha responsabilizado al Gobierno central por no aprobar una ley que prohíba estos cierres.
Pero esta situación no solo está afectando a la comunidad gallega, Castilla y León se sitúa como la región más afectada por la escasez de entidades bancarias y cajeros, y muchos territorios se han visto obligados a buscar alternativas, como en el caso de la Diputación de Salamanca, que ha creado un sistema que incorpora cajeros a los bibliobuses.No obstante el Gobierno nacional está mentalizado sobre esta cuestión, a través de Ministerio de Agricultura y este año irán destinadas varias partidas multimillonarias para paliar este problema.
En septiembre de 2020, se aprobó una moción del PSOE para estudiar la situación financiera de la España rural, a la que Teruel Existe introdujo dos enmiendas, pero después de un año, los habitantes rurales se quejan de que poco se ha avanzado. No obstante el Gobierno nacional está mentalizado, a través de Ministerio de Agricultura y este año irán destinadas varias partidas multimillonarias para paliar este problema.