El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tuvo ayer su primera entrevista después de realizar uno de los cambios de Gobierno más significativos desde su investidura en 2020, y fue a través de Telecinco, junto a Pedro Piqueras.
Durante la media hora que duró la entrevista, Sánchez tuvo la oportunidad de posicionarse en varios aspectos, como las movilizaciones ocurridas en Cuba en los últimos días, dónde declaró que "es evidente que Cuba no es una democracia", aunque evitó calificar al país de "dictadura" como le exige la oposición española. Añadió, además que debe ser la sociedad cubana "la que encuentre el camino sin injerencias" y que la "comunidad internacional deberá ayudar".
Expresó igualmente su preocupación ante las duras imágenes de la represión policial contra las protestas y ante la detención de periodistas, "Detener a una youtuber o a un periodista, en este caso de ABC, un periódico español, me parece improcedente", añadiendo que el Ministerio de Asuntos Exteriores ya ha solicitado su "pronta liberación". Además, quiso mostrar su "máximo respeto" a las miles de personas que se encuentran manifestándose al grito de "libertad" contra el presidente Miguel Díaz-Canel en el país cubano.
Añadió también Sánchez que la crisis del Covid-19 ha causado unos efectos devastadores, afectando sobre todo al turismo, tan importante en esos países latinoamericanos, afirmando que "debemos acelerar la donación de vacunas a estos países hermanos".
Ya en clave de política nacional, el presidente se refirió a los recientes cambio que ha realizado en su Gabinete con la incorporación de siete nuevos ministros y ministras y la salida de dirigentes socialistas clave como Carmen Calvo o José Luis Ábalos. Sánchez afirmó que al prescindir de aquellos ministros, pretende iniciar una nueva etapa: "La etapa de la recuperación", agradeciendo, no obstante, el trabajo de aquellos que han formado "el mejor Gobierno para la mayor emergencia sanitaria en 100 años" y "tienen mi enorme gratitud", pero señalando que "los relevos se tienen que producir en todos los equipos", queriendo formar una nueva plantilla con personas que reúnan tres componentes importantes: que estén "vinculadas a la política local", sean "jóvenes con experiencia acreditada" y con la intención de conformar el "Gobierno con más mujeres de la Unión Europea" para una aportación "más feminista".
Sobre las críticas recibidas de parte de la oposición, la ha calificado como "la oposición más furibunda de la Unión Europea", lamentando la falta de voluntad para el diálogo, "A mí me parece que efectivamente necesitaríamos tener una relación algo más cordial y constructiva entre el Gobierno y los partidos de la oposición".
La polémica sobre las declaraciones hechas sobre el consumo de carne originada con la iniciativa del ministro Alberto Garzón, se ha tratado igualmente en la entrevista, "el sector de la agroalimentación también es consciente de que tiene que hacer esta transformación" y que el Gobierno debe "acompañar en esa transformación al sector de la agroalimentación".
También el presidente respondió a preguntas sobre si el cese de la exministra de Exteriores, Arancha González Laya, se debe a su deseo de normalizar las relaciones con Marruecos. A lo que Sánchez respondió que la exministra Laya siempre ha querido tener "las mejores relaciones con un país "amigo" como Marruecos, que es un "socio prioritario" para España. Asimismo, sobre la crisis migratoria de dicho país vivida en España en el pasado mes de junio, Sánchez afirmó que lo ocurrido no fue solo hacia España, sino al proyecto europeo que "ha mirado con mucha simpatía" a Marruecos.
Por último, Sánchez invitó a la población a vacunarse y mantener todas las medidas de prevención mientras la vacunación avanza hacia el 70% de inmunizados en verano.