Tráfico distribuye un total de 39 drones por las carreteras españolas para controlar y registrar las posibles infracciones que se puedan producir por el territorio, con excepción de País Vasco y Cataluña. Además contarán con 35 personas para su pilotaje y otras 60 para operar sus cámaras.
La Dirección General de Tráfico ha tomado la decisión de distribuir por España hasta 39 drones para la vigilancia, 28 más que el año pasado, y que podrán servir de apoyo a los doce helicópteros de tráfico. Es por ello que el pasado martes 6 de julio, el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska asistió a la sede de la DGT para contemplar la demostración del funcionamiento de estos drones que han convertido a España en pionera en su uso para el control de tráfico.
De fabricación y tecnología españolas, estos aparatos serán utilizados principalmente para detectar conductas temerarias en las carretera y vigilancia de tramos de elevado riesgo de accidentes, así como para eventos especiales que supongan un elevado desplazamiento de automóviles; como apoyo en situaciones de emergencia que afecten a los usuarios de la vía e incluso para misiones ordinarias de ayuda a los helicópteros.
La Agencia Estatal de Seguridad Aérea ha acreditado a la Dirección General de Tráfico como operador de sistemas aeronave pilotada remotamente y notificará en el acto las infracciones al personal autorizado. Para la utilización de estos dispositivos, han formado a 35 personas para su pilotaje y otras 60 para la utilización de las cámaras que integran. Dichas funciones las podrán ejecutar agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil o por el personal de la Dirección General de tráfico siempre que obtengan el certificado requerido.
Estos drones podrán transitar por todo el territorio español, excepto en País Vasco y Cataluña, comunidades con las competencias transferidas. Tendrán bases en A Coruña, Valladolid, Zaragoza, Sevilla, Málaga y Valencia y su base central estará ubicada en Madrid, cotando con 15 aeronaves que además de sobrevolar también Castilla la Mancha, lo hará igualmente en el resto de comunidades cuando sea necesario.
Sobrevolarán a una altura de 120 metros y podrán alcanzar hasta 80 kilómetros por hora, superando temperaturas ente los 20 y 45 grados. A su vez, contarán con una autonomía de 40 minutos hasta cambiar de batería y retomar el vuelo de nuevo.
Desde 20118, la DGT lleva contadas 500 horas de vuelo con estos dispositivos aéreos y ha ejecutado el seguimiento de más de 55.000 vehículos, detectando más de 600 infracciones. Debido a esto, se ha convertido en uno de los medios más eficaces frente a la detección del uso incorrecto del cinturón, teléfonos móviles, sistemas de retención infantil y adelantamientos a ciclistas sin distancias mínimas de seguridad.