Carolina Darias, ministra de Sanidad, anunció este jueves que la flexibilización del uso de mascarillas se trata de una decisión prudente, ya que la pandemia y la campaña de vacunación están evolucionando adecuadamente. No obstante, sí será obligatoria en espacios cerrados (bibliotecas, farmacias, transporte público...), abiertos en los que no exista una separación de 1,5 metros y eventos multitudinarios al aire libre (conciertos).

Por otro lado, en las residencias o centros de atención a personas con diversidad funcional no tendrán que llevar mascarillas siempre y cuando cuenten con una cobertura de vacunación superior al 80%. Sin embargo, las personas que trabajen allí y los visitantes sí tendrán que llevarla.