No se entiende, que si tanto los gobiernos del PP como los del Psoe han aplicado indultos en situaciones incluso de extrema gravedad para la democracia española, ahora, uno de ellos, el Partido Popular, se rasgue las vestiduras con la propuesta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, alegando magnanimidad, concordia y convivencia, para conceder esta medida de gracia a los políticos catalanes que protagonizaron el procés, o la Declaración Unilateral de Independencia que apenas duró unas horas.
Para arrojar más luz sobre este asunto, en estas horas negras de la política española, donde la memoria sólo alcanza -interesadamente- al día de hoy y cada cual ha olvidado sus propios actos de apenas ayer, debemos recordar, que el partido de los que hoy se escandalizan y son beligerantes contra la propuesta de Sánchez de conceder indultos a los políticos catalanes, como son Casado, Aznar, Ayuso, Gamarra y otros dirigentes del PP, en su tiempo han indultado -como así se lo permite la ley del 18 de junio de 1870, recogida en nuestra Constitución de 1978- a terroristas y mercenarios, a banqueros corruptos, a torturadores, militares chapuceros, además de a innumerables delincuentes comunes y políticos malversadores y prevaricadores de toda calaña. Eso si, de los suyos.
De hecho, en términos numéricos, el PP en apenas 14 años de Gobierno, ha concedido casi siete mil indultos. Mientras que el Psoe, en más de 25 años de diferentes gobiernos socialistas, ha indultado aproximadamente a 9.000. Es decir, menos de 400 indultos de media por año ha realizado el Psoe frente a 500 del PP. El delirio indultador del PP, sucedió un 1 de diciembre de 2000, cuando el ministro Acebes, del Gobierno de Aznar, el que dijo que los atentados de Atocha eran obra de ETA, a sabiendas de la falsedad, en un solo Consejo de Ministros concedió el indulto a 1.328 personas, entre ellas muchos políticos del PP acusados de prevaricación y malversación. No vimos a nadie recoger firmas, claro, eran de los suyos.
Sirvan estas cifras para centrar la atención de aquellos comentaristas y líderes de opinión -de la derecha, aunque también provenientes de viejas glorias socialistas- que ahora tanto denuestan una herramienta perfectamente legal, de disposición del Gobierno de turno, de la que tanto uso han hecho ellos mismos. Pero una vez más, como no cabría esperar otra cosa, el patrón se repite: la derecha está en contra de todo aquello que hace cuando está en el poder… pero sólo lo critica cuando pasan a la oposición.. Es decir, lo que vale para ellos cuando gobiernan, no vale para los socialistas. Es así de simple, para que lo vamos a complicar. Es empírico, está demostrado.
La cronología de los indultos tras la muerte de Franco, como decimos, empieza con los gobiernos de centro de UCD (Suárez y Calvo Sotelo 1978-1982) -con un total de 1.300 indultos. Felipe González, (1982-1996) concede 5.944 en un periodo de 14 años. Con el dirigente socialista en Moncloa, por tanto, se produjeron cuatro menos que en tiempos de Aznar (1996-2004), cuando se concedieron un total de 5.948 indultos pero en un periodo de apenas 8 años. Zapatero (2004-2012), aprobó un total de 3.222 y Mariano Rajoy ha concedido 898 desde 2012-2018.
Centrémonos. Lo que tanto escandaliza ahora a la derecha es el trato de magnanimidad y benevolencia que pretende aplicar el Gobierno progresista de coalición, de Sánchez, a aquellos dirigentes independentistas catalanes, que durante el mandato de Rajoy, montaron un referéndum ilegal, y una DUI, por lo que fueron juzgados y encarcelados. Es decir, Sánchez hereda los platos rotos, producto de las políticas permanentes de desprecio y ofensa a la catalanidad y al Estatut, tanto por parte de Aznar como de Rajoy. Y es ahora quien está intentando todas las fórmulas posibles, desde la legalidad y el diálogo, para arreglar la situación y conseguir acercar Cataluña a España y dejar atrás los tiempos del desgaje y la ruptura territorial. Es Sánchez quien está pretendiendo “pegar los trozos rotos” debido a la torpeza de Aznar y Rajoy. Y aún así, en este malabarismo típico del cinismo de esta derecha, y del descreimiento de nuestros tiempos, que fomentan la pérdida del sentido del pudor y la realidad, Casado y su cohorte le dan la vuelta a todo y le acusan a Sánchez de “romper España”.
Pero le acusan sin parar, con indultos, o sin ellos, con diálogo y mesa de negociación o sin ellos. Le acusan de todo lo que sucede y también de lo que no sucede. De una cosa y de la contraria. Por ejemplo, de dictar el Estado de Alarma, primero, y después de no dictarlo. Para qué trabajar reflexivamente en propuestas políticas constructivas y leales de oposición…(todavía no conocemos ninguna). Al fin y al cabo, la caverna mediática les compra y blanquea todas las pataletas y mentiras.
Los políticos responsables del referéndum ilegal, y de la DUI, han cumplido una gran parte de sus condenas, desde que protagonizaran su acto de desobediencia o rebelión en octubre del 2017. Casi cuatro años privados de libertad. Y ahora, con otro gobierno recién estrenado en Cataluña -relativamente menos rígido que el partido burgués de Convergencia, de los Pujol y su descendencia, Junts per Cat- como es el republicano, ERC, de Pere Aragonés, el presidente español plantea una mesa de diálogo que acerque a las partes, especialmente que junte y repare a una Cataluña, desgarrada y partida en dos. Y lo plantea, como hace un estadista, con una herramienta de gran efecto y eficacia como son los indultos. ¿Es eso lo que quieren todos los españoles, que Cataluña se una y se olvide de imponer sus veleidades independentistas por la fuerza? Se supone que sí. Pero la pregunta es más tremenda y triste: ¿es eso lo que quieren Casado, Ayuso, Aznar, Abascal, Monasterio, etc. y demás lista de líderes que dirigen los partidos de derecha y extrema derecha? Ni hablar. Para nada. Bueno, quizá sí lo querrían, pero siempre que sean ellos los que lo consigan. Pero la realidad es que en el caso de que sea Sánchez, es lo último que quieren para España estos patriotas de pulserita, a juzgar por su comportamiento.
Lo último que quieren es que le salga bien la jugada política al líder socialista y consiga unir España. Así son realmente los que acusan y ponen palos en las ruedas al avance del país. Ese es todo el recorrido de su labor de oposición. Y así han sido desde el minuto uno tras perder las elecciones, una y otra vez. El Psoe ganó cinco seguidas. Desde entonces, y ya van tres años largos, no han parado de acusar al líder socialista de querer romper España. Así son, con una mano acusan y con la otra, hacen todo lo posible para que “España con Cataluña no se arreglen, no se entiendan y no se recompongan”.
Así es de traicionera y desleal, además de corrupta, es la oposición de derechas que tenemos que sufrir en España. Utiliza cualquier estratagema, por muy dañina que sea para los ciudadanos, como arma arrojadiza con tal de intentar socavar la acción de un gobierno legítimo. No hay más que ver todos los intentos de Casado para evitar que la Comisión Europea concediera a España los 140.000 millones de euros de los Fondos para la Reconstrucción, Desarrollo y Resiliencia tras la pandemia. Hasta seis veces, ha intrigado Casado en los despachos europeos para boicotear estas ayudas. ¿Quizá porque si Sánchez consigue que España recupere la economía perdida a consecuencia de la terrible pandemia, el no va a llegar nunca a ser presidente del Gobierno?. ¿De verdad le importa más su futuro que el de 47 millones de españoles?
Pablo Casado, Aznar, Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez-Almeida, entre otros tantos voceros políticos así como periodistas a sueldo de la llamada caverna mediática, se han vuelto a aplicar a fondo contra España y su capacidad para conceder medidas de gracia. Esta vez, olvidan con desfachatez supina sus casi 9.000 indultos, concedidos, desde a delincuentes comunes, por drogas, robos con violencia, lesiones que causan grave deformidad, estafas, hasta políticos por prevaricación, malversación, pasando por homicidios, abusos sexuales, torturas policiales, coacción para la prostitución... Prácticamente todos los delitos han sido en algún momento perdonados total o parcialmente. Pocas veces, o ninguna, sus medios afines, se escandalizaron o dieron tanta cobertura y repercusión a esta medida de gracia potestad exclusiva del Gobierno de España. Hasta ahora, desde ningún partido de los considerados de Gobierno, (PP y PSOE) se recogieron firmas y movilizaciones a la población en contra de estas medidas con el fin de desestabilizar al gobierno de turno.
Desde que está de moda el éxtasis de la nueva musa de la derecha y su vacuna de cerveza contra el Covid,19, con la política simplista y descarnada del “muerto al hoyo y el vivo al bollo”, en Madrid sobre todo, parece que la caverna mediática entretiene a la plebe distrayendo su atención de los verdaderos problemas que les acucian (Sanidad, Educación, Prestaciones, Salarios, Pensiones, Igualdad, etc.). En la Roma antigua se les daba pan y circo y en esta nueva Madrid, la Corte de los milagros, se les da cañas y terrazas rebosantes para que se diviertan al margen de la pandemia. Quien va a pedir conductas responsables para con los demás. Mientras les distraen con el circo, la desigualdad sigue creciendo, la pobreza extrema se agranda, la privatización hace ricos a unos pocos y pobres a muchos, la precarización y parasitación de los servicios públicos en beneficio de algunas empresas propiedad de los “amiguetes” son la estrategia de esta mafia político-económica (así les llaman los jueces, no nosotros).
Llama la atención en Europa, y así lo describen los medios serios del continente, cómo en España, una Oposición que pretende ser alternativa de gobierno, no aporta nada. Nada de nada. Se opone a todo. A todo y a su contrario. Sin argumentos, sin propuestas, sin ética ni estética, sin lealtad ni patriotismo. Y lo que es peor, utilizando la política grosera, la crispación, la mentira, el bulo, la intriga y la denostación del propio país, de España, en los organismos europeos, con tal de derrocar a un Gobierno legítimo al que no han conseguido ganar democráticamente en las urnas.
Todo les sirve. Antes le tocó el turno al aprovechamiento de una gran calamidad humanitaria y sanitaria como ha sido la pandemia del Covid19, para acusar al Gobierno poco menos que de enterrador de muertos. Después fue el boicot a los Fondos de Recuperación. Ahora son los indultos. No hay peor pesadilla para Casado y su gente, que el hecho de que el presidente Sánchez, consiga solucionar el conflicto territorial catalán. Como sucedió con la rendición de la banda terrorista ETA, que consiguió un gobierno socialista, el de Zapatero, con Alfredo Pérez Rubalcaba de Ministro. También en aquellos años, utilizaron la sangre de las víctimas de ETA, como ahora han utilizado las de los enfermos y muertos por la pandemia.
Han boicoteado las medidas de restricción para frenar la pandemia y disminuir sus trágicas consecuencias en la salud y la vida de los españoles, especialmente de los madrileños. Porque, por suerte y esto hay que reconocerlo, el PP también tiene líderes regionales sensatos y con cierto sentido de Estado entre sus filas. Pero no es la cúpula de Génova, por desgracia. Han boicoteado la logística de las vacunas, especialmente la musa madrileña, llenando, como decimos, los bares y la capital de fiestas, a pesar de la saturación y penuria en los hospitales. Y ahora intentan solapar el éxito del plan de vacunación puesto en marcha por nuestro Gobierno, como intentan mancillar la idoneidad del Gobierno para aplicar los Fondos de Restructuración y así dar comienzo a la recuperación económica. Es su peor pesadilla. Si Sánchez consigue triunfar con los Fondos y triunfar con Cataluña… El PP de la crispación se va a quedar tan frustrado que volverán a la foto de Colón y al ruido, y a las firmas, y a las mentiras y a las conspiraciones… Porque en el fondo, hay que tapar lo que tienen bajo las alfombras. Sus más inmediatos precursores están inmersos en procesos judiciales que se complican y parecen no tener fin… que hacen del PP el partido más corrupto de Europa. No lo decimos nosotros. Lo dicen los jueces y Tribunales. Tengan un poco de sosiego. Dignidad. Paren, templen y limpien su partido. Para que un día puedan estar en condiciones de arrimar el hombro, un poco al menos, para ayudar en la digna labor de sacar adelante a España.
Los indultos son apoyados por los ciudadanos, los sindicatos, la patronal, Europa, la Iglesia catalana, los partidos independentistas (léase la Carta de Oriol Junqueras reconociendo su equivocación). Así lo quieren los catalanes, los españoles. Así lo quiere Europa, que aplaude los indultos. Así lo quiere hasta la Iglesia catalana. La banca. La patronal. Las empresas obligadas a salir de Cataluña que están desando volver. ¿Qué pasa Casado, Aznar, Gamarra, Teodoro, ni siquiera van a escuchar a los barones de su propio partido, que se avergüenzan de su falta de patriotismo y lealtad al Estado?
El lema de Génova, la sede del PP, pagada con dinero negro, del “cuanto peor mejor”, ya ven donde les ha conducido. No se engañen, las cuatro bengalas y fuegos de artificio de la musa madrileña, se deshacen en el aire y caen al suelo cual carcasas inútiles. Están a tiempo. Arrimen el hombro, con los indultos, con los fondos, con la reconstrucción de España.