A 13 días de que se produzca la convocatoria automática de unas nuevas elecciones en Cataluña, ERC y Junts siguen se acercar posturas para conformar un nuevo Gobierno. La otra vía que se abrió para la investidura de Pere Aragonès, gobernar con la izquierda, parece que también queda bloqueada ya que este jueves En Comú Podem ha decidido romper las negociaciones ante la negativa de los republicanos de alejarse definitivamente de Junts y descartar que entren en un futuro Govern.
La incertidumbre sobrevuela el panorama político catalán y la repetición de elecciones cada vez es más probable. Las formaciones independentistas se comprometieron a no repetir los comicios y llegar a un acuerdo antes de adelanto electoral automático, pero a 13 días de finalizar el plazo de investidura, las negociaciones entre ERC y Junts no han prosperado- Por tanto, el tiempo se acaba.
Ante las dificultades que encontró el líder de los republicanos con sus 'socios' independentistas, Pere Aragonès buscó una vía alternativa en la que ERC formaría un Gobierno en solitario para el que necesitaba el apoyo de la CUP, En Comú Podem y al menos cuatro votos a favor de Junts. Esta opción no parecía viable debido a que Junts aseguró que no apoyaría la investidura de Pere Aragonès para un Govern en solitario, pero se ha terminado de descartar con la intervención de la líder de los 'comunes', Jéssica Albiach, que aseguró que no apoyarían el Govern de ERC si no se comprometen a que Junts no este en el poder "ni ahora ni durante la legislatura".
Este bloqueo deja a ERC con poco margen para negociar una investidura y Pere Aragonès reclama a Junts que lleguen a un acuerdo para no repetir unas nuevas votaciones: "Hagamos honor a la palabra, cumplámosla, cumplamos el compromiso de todos que es de no ir a elecciones, hagamos Govern, hagámoslo ya y evitemos la repetición de elecciones, es un imperativo político", aseguró el president en funciones en su intervención sobre la situación sanitaria y económica.
La falta de consenso entre ERC y Junts ha llevado a la CUP a hacer de mediador para intentar crear un Govern de formaciones independentistas. Para ello, este jueves propuso a ambos partidos firmar un "acuerdo de mínimos" con cuatro puntos para evitar una repetición electoral: dar una respuesta a la crisis económica y social; construir un muro de defensa de los derechos fundamentales y básicos de la sociedad catalana; una nueva estructura para la solución democrática de la autodeterminación; crear un espacio para el debate independentista más allá de la gobernabilidad. Tras la reunión en la que se debatió este acuerdo, los tres partidos comunicaron su compromiso a evitar unas nuevas elecciones, pero aún no se ha producido ningún avance en la investidura. Y cada vez está más claro que ese compromiso es solo una especie de 'brindis al sol'
Por tanto, la llave para una investidura de un Govern independentista y que no se produzcan nuevas elecciones la tienen ERC y Junts si consiguen llegar a un acuerdo. Pere Aragonès recuerda que "un Govern en funciones no puede presentar presupuestos ni proyectos de ley a esta Cámara y es una necesidad que haya una investidura que ponga el país en marcha de nuevo".
Mientras tanto, el ganador de las elecciones, el socialista Salvador Illa, sigue reclamando que se escuche lo que la ciudadanía votó y pide al líder de ERC que deje que otros partidos intenten llegar a consensos para construir una alternativa no independentista ante el fracaso de las formaciones que durante la última década han capitalizado el poder en la región.