Vox lograba sacar adelante hace unos días, un recurso en la Junta del distrito de Ciudad Lineal para eliminar un mural feminista que cubre el polideportivo de La Concepción. Sus razones, que el mural contiene un “mensaje político” con “una política comunista y un pensamiento totalitario”, el mensaje concretamente: “Las capacidades no dependen del género”, acompañado de mujeres emblemáticas de la lucha por la igualdad de género como Rosa Parks, Angela Davis o Frida Kahlo. Este recurso consiguió salir adelante con el apoyo de PP y Ciudadanos, los mismos partidos que apoyaron la pintada de este mural en 2018 bajo la alcaldía de Manuela Carmena y que ahora se dejan arrastrar por la ultraderecha. Más Madrid presentaba al día siguiente de esta decisión una reposición y las feministas socialistas organizaron una auténtica rebelión por la permanencia del mural. Las protestas a través de las redes sociales hicieron lo suyo consiguiendo una gran movilización frente a las puertas del polideportivo el domingo.
Los vecinos del distrito de Ciudad Lineal en Madrid han logrado salvar el mural feminista que cubre el polideportivo de La Concepción. Esto llega tras la decisión de Más Madrid de presentar un recurso de reposición contra la decisión adoptada en la Junta del distrito de eliminar la pintura por contener un “mensaje político” que no corresponde con los valores que impulsa el centro deportivo. La decisión fue promovida por Vox y apoyada por sus socios, PP y Ciudadanos pero, tras la gran presión política y popular, la formación naranja dirigida por la vicealcaldesa, Begoña Villacís, ha terminado enmendándose a si misma y ha optado por apoyar el recurso de Más Madrid junto a los votos del PSOE.
Tanto Ciudadanos como PP mantenían su decisión según explicaba Ángel Niño, concejal y presidente de la Junta en Ciudad Lineal, de la formación naranja, al contener mujeres que no representan al feminismo. Almeida, alcalde de Madrid, por su parte, recurría al comodín de ETA explicando que existen murales que “ensalzan a los terroristas en el País Vasco”. No obstante, tras la oleada feminista, Begoña Villacís, vicealcaldesa de Ciudadanos, ha enmendado su propia decisión, escuchando las protestas de las feministas socialistas y apoyando el recurso de Más Madrid para mantener el mural. Aun así, hasta el último momento ha mantenido el discurso más que cuestionable sobre el movimiento feminista y la igualdad calificándolo de “partidista, retrógrado y patrimonialista” ya que recoge a figuras de “izquierda” y añadiendo que hay que incluir todos los feminismos, también el de Vox, partido que niega las desigualdades entre hombres y mujeres y la existencia de la violencia de género.
El pasado día 21 de enero, la formación ultraderechista Vox lograba sacar adelante un recurso para eliminar un mural que contiene a mujeres emblemáticas del feminismo como Rosa Parks, Angela Davis, Frida Kahlo, Chimamanda Ngozi o Valentina Tereshkova bajo el lema “las capacidades no dependen del género” para impulsar el deporte en condiciones de igualdad entre las mujeres. Esta pintura de Unlogic Crew fue realizada bajo la alcaldía de Manuela Carmena en 2018 con el apoyo precisamente del PP y Ciudadanos, que ahora se dejan arrastrar por completo por la ultraderecha. La formación verde apostaba por eliminar el “mensaje político” y consiguió el pleno apoyo de sus socios en el Gobierno.
Desde entonces, una oleada feminista de protestas comenzó en redes sociales y luego se trasladó a una concentración el domingo a las puertas del polideportivo. Tan solo un día después de que la Junta aprobará el recurso, Más Madrid presentó su reposición alegando en su cuenta de Twitter que desde la Administración Almeida “quieren eliminar de la historia a las mujeres y el compromiso de la ciudad por la igualdad”. Esta idea era también apoyada por Podemos y en la red social florecieron los hashtags “el mural no se toca” y “el mural se queda” con mensajes de crítica contra el Gobierno del Ayuntamiento de Madrid y su giro radical hacía la derecha. A la protesta acudían figuras políticas como Iñigo Errejón, líder de Más Madrid, e Isabel Serra, diputada en la Asamblea de la capital y portavoz de Podemos. Además, una petición de Change.org para evitar la retirada del mural recogía más de 20.000 firmas.
Mientras, Ángel Niño, el concejal presidente de Ciudad Lineal, de Ciudadanos, continuaba defendiendo la propuesta de Vox: “Siempre me encontraréis a favor de la #igualdad entre hombres y mujeres sin distinción ni ideología política”, comenzaba el mensaje, “debemos rendir homenaje a quienes hacen de nuestra sociedad un lugar mejor y son ejemplo para nuestros jóvenes y en este mural, no todas las figuras lo son”, seguía leyendo. Almeida, alcalde de Madrid, también salía a la defensa de la decisión apostando por el comodín de ETA y entendiendo que el mural es un “ataque al feminismo”. Justificaba la decisión ya que Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, no ha protestado contra murales que “ensalzan a los terroristas en el País Vasco” y que “humillan constantemente la dignidad de las víctimas”, declaraciones que ofendieron a muchas de estas víctimas por recurrir a ellas para hacer política.
La posición de Ciudadanos parecía mantenerse hasta que ayer, Begoña Villacís, vicealcaldesa de Madrid, se desmarcaba de su propio concejal y de la decisión tomada en un primer momento, apoyando el recurso presentado por Más Madrid en el Pleno de Cibeles. “Nuestra política es hacer cosas, no borrar cosas. Quiero una ciudad que sea diversa. No solo gobierno a la gente que me ha votado y respetar aquello que no te gusta forma parte de ser vicealcaldesa de toda una ciudad”, expresaba para justificar su decisión. No obstante, mantenía las quejas contra el mural en un discurso cuestionable a favor del movimiento feminista calificándolo de “partidista, retrógrado y patrimonialista” por incluir a las mujeres que “defienden el feminismo y además son de izquierdas”. Lo describía como “feminismo excluyente y sectario” y añadía la necesidad de incluir todos los feminismos hablando del “feminismo de Vox”, un partido que niega la violencia de género y las condiciones desiguales entre hombres y mujeres. También añadía que se podían incluir figuras históricas como Margaret Thatcher, que emitió frases como: “Porque odio el feminismo. Es veneno”.
PP y Vox han criticado duramente este cambio de rumbo que la propia Villacís ha descrito como “rectificación”. La concejala de Vox, Arantxa Cabello, criticaba a la formación por “falta de lealtad” y continuaba cargando contra el mensaje feminista del mural: “No comparto la ideología de género y no representa ningún valor para las mujeres”, expresaba sobre la pintura con mujeres “que han defendido la violencia” y que representan “una política comunista y un pensamiento totalitario”. Andrea Levy, delegada de Cultura y portavoz municipal del PP, también criticaba “la autonomía y la descentralización” al desmarcarse de una decisión tomada en la Junta.