El ministro de Sanidad, Salvador Illa, abandonaría su cartera en este departamento antes del viernes de la semana que viene para ocupar su puesto como candidato por el PSC a las elecciones catalanas. Así lo confirmaba el actual primer secretario del partido, Miquel Iceta, en una rueda de prensa en la que establecía que él también abandonaría su puesto antes de que comience la campaña electoral, el próximo 29 de enero. De esta forma, disipaba las dudas que han surgido tras la intención del Govern de suspender el proceso electoral por la pandemia y que ha sido paralizado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. Illa hace tiempo que anunció que permanecería en el Ejecutivo hasta que comenzara la campaña. Las últimas encuestas dan la victoria al socialista en lo que se ha llamado como el “efecto Illa” al conseguir aglutinar voto que normalmente se dispersa en varios partidos.
Miquel Iceta, primer secretario del PSC, confirmaba este viernes que el candidato y ministro Salvador Illa, dejará la cartera de Sanidad la próxima semana para centrarse ya en unos comicios de los que aún no se sabe la fecha definitiva, a la espera de la decisión de la Justicia. Según Iceta este movimiento forma parte de las promesas electorales que se asumieron cuando los socialistas nombraron a Illa como el nuevo candidato catalán, aunque la decisión llega en plena incertidumbre sobre la fecha de celebración de las elecciones en manos del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña tras el decreto de suspensión de la Generalitat. No obstante, ya se celebre la votación el 14 de febrero, la fecha inicialmente fijada, o el 30 de mayo como pretende el propio Gobierno catalán, parece que Illa ocupará su nuevo puesto antes del viernes de la semana que viene.
La incertidumbre sobre el futuro de Illa llegaba tras la decisión tomada por el Govern de suspender la actual convocatoria de las elecciones para abrir una nueva el 30 de mayo. Los motivos, el coronavirus que mantiene a España en plena tercera ola con los peores datos registrados hasta el momento. El PSC era partidario de una solución más sencilla que no pasaba por suspender la convocatoria sino por aplazarla hasta mediados de marzo, asegurando que el decreto presentado ante los tribunales “presenta muchos interrogantes jurídicos” y existe mucha incertidumbre sobre la sentencia final. Aun así, esta decisión no se conocerá hasta dentro de, al menos, una semana, con un plazo máximo hasta el 8 de febrero, tan solo 6 días antes de la convocatoria.
La campaña electoral catalana, hasta que la justicia no tome una decisión, se mantiene según los tiempos marcados y tendría su comienzo el próximo viernes 29 de enero, cuando se cubran las calles con carteles de todos los candidatos. Se prevé que la decisión judicial, aunque está siguiendo un proceso acelerado para dictar la sentencia, no llegaría hasta una vez comenzada esta campaña que podría resultar inútil si, finalmente, se aplaza la fecha.
Ante esta información, Iceta confirmaba ayer: “Es decir, antes del jueves de la semana que viene a las 12 de la noche, él habrá renunciado a su cartera”. De esta manera resolvía las dudas sobre si Pedro Sánchez iba a esperar a la llegada de la decisión judicial para modificar su Gobierno. Anunciaba, además, que el PSC acataría cualquier decisión final tomada por el Tribunal Superior a pesar de que duda de la “capacidad” que un gobierno tiene para convocar elecciones sin presidente, en el caso final de que la votación se aplace al 30 de mayo. “No hay incertidumbre, lo que hay es un Govern haciendo mal las cosas. Ya les habíamos advertido de los problemas jurídicos que traería el decreto”, contestaba al presidente en funciones, Pere Aragonés, que apremiaba al TSJC para que tomará pronto una decisión. Explicaba no haber recurrido esta sentencia para no ser acusados de buscar ventajas electoralistas.
Si finalmente se cumple esta información, Pedro Sánchez tendría que reorganizar el Gobierno la semana que viene y, previsiblemente, será Carolina Darias, la actual ministra de Política Territorial y Función Pública, la que ocupe su puesto. Iceta pasaría a su vez a ocupar la actual cartera de Darias.
EL “EFECTO ILLA”
La última encuesta realizada por el CIS otorga una victoria ajustada al PSC que tendría que formar una coalición con ERC para poder gobernar. El sondeo concede 35 y 33 escaños a cada partido respectivamente, y una coalición sumaría los 68 asientos, cifra que da la mayoría absoluta en el Govern.
Iceta sostenía que Salvador Illa ha atraído gran cantidad de voto que antes se dispersaba en otros partidos: “El efecto Illa hoy ya no es un efecto, es el factor Illa”, declaraba. Lo cierto es que, antes del nombramiento de Illa, las encuestas daban por ganadores a los independentistas, conformando un escenario parecido al actual con ERC y Junts alcanzando una mayoría juntos. Esto rompería con la hegemonía independentista que ha liderado Cataluña los últimos años, aunque aun se calcula que hay un 40% de personas indecisas sobre su voto.