El ministro de Tansportes, Movilidad y Agenda Urbana, Jose Luis Ábalos, ha afirmado que el aeropuerto de Barajas retomará su actividad a lo largo de la tarde “de forma muy gradual”. Por su parte, y después de que Madrid fuera desbordada por la borrasca Filomena, y se convirtiera en un caos histórico, con la ciudada paralizada, el Ayuntamiento madrileño estudia solicitar al Gobierno la declaración de zona catastrófica, según ha dicho su alcalde, José Luis Martínez-Almeida. Dos días después de la gran nevada del viernes, el acceso a los hospitales aún no han sido despejados, muchos sanitarios no han podido ir a su casa desde entonces, y otros no han podido acudir a sus turnos. Las ambulancias han quedado inutilizadas, y cientos de emergencias asolan la ciudad, sin que ninguna autoridad madrileña, haya sido capaz de tomar previsiones o soluccionar la grave situación. El domingo, decenas de voluntarios privados, dueños de vehículos cuatro por cuatro, tuvieron que sustituior la falta de soluciones municipales por parte de las autoridades regionales.
En lo que se refiere a la evolución de la tormenta Filomena, los ministros han informado de que se extienden hacia el norte y noreste peninsular y sobre todo a Aragón, Cataluña y la Comunidad Valenciana. Por su parte, el presidente de la Comunidad de Aragón ha anunciado que suspende las clases en los centros no universitarios el lunes y el martes, como ya hicieron este sábado Madrid y Castilla-La Mancha. La borrasca Filomena empieza a perder fuerza en el centro del país, pero sus efectos aún se pueden repetir a partir de las cinco de la tarde, con fuertes nevadas, en Aragón, Cataluña y la Comunidad Valenciana, que ya están en Alerta Roja. Morella, entre Castellón y Teruel, es una de las localidades más afectadas por la nieve. Desde el Ayuntamiento piden mucha precaución y no circular.
En su comparecencia, junto al ministro Ábalos, su compañero, el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha pedido a la población que evite los desplazamientos por la borrasca, que ya se ha cobrado cuatro vidas hasta este domingo. Tras ser preguntado por la prensa, tras la reunión de la Unidad de Emergencias, el ministro ha detallado que de las cuatro víctimas mortales registradas, dos fallecieron en Málaga, un hombre de 54 años, en la localidad madrileña de Zarzalejos, en la noche del miércoles, aterido en su coche atrapadom y el curto se trataba de un indigente muerto de frío en Calatayud: “Se avecina una semana de frío intenso que va a convertir la nieve en hielo”, ha dicho el ministro de Interiro. Ambos ministros han informado de que aún quedan 171 carreteras cerradas y 435 en las que hay que circular con cadenas. El Gobierno ha preparado vehículos para transportar medicinas, alimentos y vacunas para asistir las necesidades de los ciudadanos.
Durante el viernes, día de la gran nevada, como el sábado, día del atrapamiento de centenares de ciudadanos madrileños en sus coches, han ido compareciendo ante los medios, tanto el delegado del Gobierno de Madrid, Jose Manuel Franco, como el alcalde de Madrid, Martínez Almeida. Y sobre todo los dos ministros involucrados en el temporal a nivel nacional, de Tráfico, Puertos, Aeropuertos, Red Ferroviaria o Red Nacional de Carreteras, tanto Jose Luis Ábalos, como Fernando Grande Marlaska, que llevan cuatro días prácticamente sin descanso, trabajando día y noche.
Sin embargo, muchos madrileños se han preguntado dónde estaba estos dos días, la omnipresente presidenta regional Isabel Díaz Ayuso. Desaparecida durante la noche aciaga de la tormenta, y durante la mañana siguiente, no apareció hasta dos horas más tarde de que se iniciada la reunión con la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 ,ASEM 112, en Pozuelo de Alarcón. Y fue para decir que se suspendían las clases durante los próximos días 11 y 12 de enero. Y que se iban a encender las calefacciones de los colegios. También ha exhibido como médico propio, la buena disposición de voluntarios particulares que han puesto al servicio de llegadas y calidades a los hospitales, sus vehículos cuatro por cuatro. De su responsabilidad por los ciudadanos atrapados sin poder regresar a sus hogares, hospitales, etc, ni palabra. Tampoco se les ocurrió pedir ayuda a la UME del Ejército para desatascar los camiones y los coches cruzados, hasta las 23 horas del viernes, mientras otras ciudades vecinas afectadas, como Toledo, ya lo habían hecho desde primeras horas del mediodía.
En cuanto a la apertura del Aeropuerto de Madrid, Adolfo Súarez, Barajas, Ábalos ha explicado que, por el momento, regresarán a sus bases los aviones que fueron desviados este viernes y el sábado por la tormenta de nieve, y luego el resto de operaciones de una forma progresiva. Aún así, el titular de Transportes ha pedido a los usuarios que se informen antes de los vuelos programados y que consulten con su aerolínea.
Hoy domingo, con la capital y alrededores bajo un manto blanco de medio metro, empezaba a despertar con docenas de voluntarios prestando sus cuatro por cuatro para traer y llevar a la gente a los hospitales y poco a poco, la normalidad se va recuperando, pero se toman precauciones de fundamentes y otras, para hacer frente a las oleadas de frío y heladas que se esperan.
Le segunda fase del temporal Filomena va a ser muy compleja, en la que el hielo va a dificultar la vuelta a la normalidad y para la que se pide colaboración ciudadana a fin de evitar desplazamientos y para ayudar en la retirada de nieve. El director de la Agencia de Seguridad y Emergencias de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, ha explicado a las agencias que se mantiene en el nivel 2 del Plan de Inclemencias Invernales.
El responsable de Emergencias ha pedido a los vecinos voluntarios que si quieren limpiar sus aceras que lo hagan, pero con responsabilidad, ya que hay picos de hielo y nieve acumulada en los canalones y los aleros, y puede ocasionar accidentes. Los medios mecánicos de la Comunidad de Madrid, de la Dirección General de Carreteras regional y estatal y de los municipios de la región llevan horas trabajando para recuperar y liberar los accesos y vías internas de las ciudades.