El primer ministro británico, Boris Johnson, ha anunciado este lunes el confinamiento estricto para Inglaterra, similar al del mes de marzo, que durará al menos hasta el 15 de febrero debido al aumento considerable de las cifras de contagios por coronavirus. En este sentido, las autoridades británicas informaron este lunes de 58.784 nuevos contagios en el país, batiendo un nuevo récord diario de casos desde el inicio de la pandemia. Esta cifra confirma una curva epidemiológica disparada a la alza durante esta tercera ola a causa de la nueva cepa de Covid-19 que persiste gravemente en Reino Unido. El boletín oficial incluye, además, 407 muertes más por la enfermedad, por lo que el país suma en total 2.713.563 contagios y 75.431 decesos. Pocas horas antes del cierre de Inglaterra, la ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, había ordenado medidas similares para Escocia que durarán hasta final de mes, incluido el cierre temporal de las escuelas. Por su parte, Irlanda del Norte ha programado una reunión del Ejecutivo para discutir si aplica restricciones similares en la región.
La pandemia de coronavirus no cesa en Reino Unido. Este lunes ha dejado 58.784 nuevos contagios en Inglaterra, lo que supone un nuevo récord diario de casos desde que el virus llegó al país y confirmando de esta manera, una curva epidemiológica en alza durante esta tercera ola. Asimismo, la cifra de nuevas muertes se sitúa en 407, dejando de esta manera una cifra total de 2.713.563 contagios y 75.431 decesos desde el inicio de la pandemia.
Este notable aumento de los casos en el país ha provocado que el primer ministro, Boris Johnson, haya anunciado un confinamiento total para Inglaterra desde este miércoles y que durará como mínimo hasta mediados de febrero. “Tenemos que dar nuevos pasos para detener este aumento y salvar vidas”, ha declarado el primer ministro.
Por su parte, el secretario de Salud, Matt Hancock, ha atribuido el repunte de contagios a la nueva cepa detectada en el sur de Inglaterra y la proveniente de Sudáfrica, que también se ha propagado por suelo británico.
Estas nuevas restricciones anulan el sistema de niveles de alerta por zonas que actualmente se encuentra en vigor. Solo se podrá salir de casa en seis casos: al trabajo si no es posible teletrabajar desde casa, comprar imprescindibles, hacer ejercicio una vez al día cerca de casa, cuidar o ayudar a personas vulnerables, por motivos sanitarios, o para huir de una amenaza de daño o violencia. Asimismo, los colegios, institutos y universidades funcionarán de manera telemática a partir de este martes y las escuelas infantiles podrán seguir funcionando, aunque respetando los grupos burbuja.
Debido a la alta incidencia provocada por la Covid-19, Escocia también se ha visto obligada a adoptar un confinamiento total para frenar la pandemia en el país. Pocas horas antes del anuncio del cierre de Inglaterra, la ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, había ordenado medidas similares para Escocia. El país también sufrirá un confinamiento que comienza a medianoche de este lunes y durará todo el mes de enero, incluido el cierre temporal de las escuelas. Por su parte, Irlanda del Norte ha programado una reunión del Ejecutivo para discutir si aplica restricciones similares en la región.
“No exagero al decir que estoy más preocupada que nunca por la situación desde marzo del año pasado”, ha expresado Sturgeon. “Nuestro deber es actuar lo antes posible para salvar vidas y proteger la sanidad pública”, ha comentado, al mismo tiempo que no ha descartado prolongar estas medidas si la situación sigue sin mejorar. En las últimas 24 horas en Escocia se ha notificado 1.905 nuevos casos tras realizarse 13.810 test, un 15% de ellos positivos. Desde el inicio de la pandemia de Covid-19 el total de casos en Escocia asciende a 127.453 y 4.578 personas han muerto a causa de la enfermedad.
El nuevo confinamiento en Inglaterra y Escocia es el más duro desde el mes de marzo, bajo la vuelta del mensaje de “Stay at home” (“Quedarse en casa”).
“La última fase de la lucha”
“Tenemos que tomar nuevas medidas para contener la nueva variante del virus, que es entre un 50% y un 70% más contagiosa”, ha insistido Johnson tras el forcejeo que ha tenido que sufrir el primer ministro británico con el ala dura de su propio partido, que no querían imponer nuevos confinamientos.
“Las semanas que nos esperan son probablemente las más duras, pero estamos en la última fase de la lucha, si logramos vacunar masivamente a la población”, ha declarado Johnson. Por ello, invita a que toda la población se ponga la vacuna y realizarlo lo antes posible, ya que el sistema sanitario está al borde del colapso ante el aumento imparable de casos.
El sistema sanitario, a punto de desbordarse
Los científicos asesores del Gobierno británico han aumentado la alerta al nivel 5 en todo el Reino Unido advirtiendo que si esta medida no se toma en serio, el sistema sanitario podría colapsarse en tres semanas, ya que se atienden a más de 26.000 pacientes.
“Los casos están subiendo casi en todas partes, debido a la variante más transmisible. No estamos seguros de que el NHS (Servicio Nacional de Salud, por sus siglas en inglés) pueda afrontar más repuntes de casos sin tomar medidas y existe el riesgo de que se sature en los próximos 21 días”, han comunicado los científicos.
Vacuna de Oxford
Al fin y al cabo no todo son malas noticias. Este lunes Brian Pinker, un paciente de diálisis británico de 82 años, se ha convertido en la primera persona en el mundo en recibir la vacuna desarrollada por Oxford y AstraZeneca para frenar la Covid-19.
El hombre ha expresado su agradecimiento por recibir la vacuna y ha afirmado que está “realmente orgulloso” por el hecho de que se haya desarrollado en Oxford.