La semana pasada, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, defendía la eficacia de haber construido un hospital fantasma para el que no hay personal sanitario: “Conozco a pocos médicos que no quieran inaugurar y formar parte de este proyecto pionero”, pero las críticas desde el sector sanitario y los sindicatos dicen lo contrario. Para las asociaciones médicas y sanitarias la construcción de este hospital para la pandemia, es una ensoñación de la errática presidenta que no ha tenido en cuenta la necesidad de contratar nuevos profesionales para que se refuerce realmente la Sanidad, pero parece que va a quedar más desabastecida que antes.

El nuevo hospital de Ayuso comenzará su actividad abriendo un único pabellón para el que se necesitarán 669 sanitarios. El problema sigue siendo el mismo, para poder poner en marcha el hospital se necesitan sanitarios y la Comunidad de Madrid no está dispuesta a contratar a ningún profesional. Hace dos semanas el consejero de Sanidad, Enrique Ruíz Escudero, ya anunciaba de forma oficial que procederían al traslado de personal de otros centros tras unas declaraciones de Ayuso para Telemadrid que se convirtieron en un conjunto de balbuceos y evasivas a la pregunta sobre la procedencia de los nuevos profesionales para Valdebebas. Hoy, la comunidad ha abierto unas listas para que sean los profesionales los que se presenten voluntarios pero, ante la gran posibilidad de que así no se logren cubrir los puestos, el Ejecutivo procederá a un traslado forzoso de los sanitarios.

En total, el Hospital Enfermera Isabel Zendal necesita 247 enfermeros, 179 auxiliares de enfermería, 60 celadores, 39 técnicos de radiodiagnóstico, 8 fisioterapeutas, 7 auxiliares de farmacia, 6 trabajadores sociales, 8 auxiliares administrativos de admisión y atención al paciente, 1 técnico de prevención de riesgos laborales y 5 auxiliares administrativos de atención al trabajador y gestión. Este segundo pabellón de los tres con los que cuenta el centro está dotado con 240 camas en planta, 32 camas de cuidados intermedios y 16 camas UCI. El plazo para cubrir estos puestos: 10 días. Si se cumpliera este plazo y los puestos continuaran sin cubrir se procedería al traslado forzoso que de aquellos profesionales contratados de forma temporal para reforzar otros hospitales que se ven desbordados por la pandemia. La comunidad además no establece el plazo de duración de este traslado. Se prolongará “el tiempo necesario para atender las necesidades asistenciales por coronavirus”, establecen en el documento presentado a los sindicatos.

El miércoles pasado, en su intervención en la Asamblea de Madrid, la presidenta defendía su hospital y la gestión del mismo. “Conozco a pocos médicos que no quieran inaugurar y formar parte de este proyecto pionero”, pero las declaraciones de los propios médicos le contradicen. El portavoz de la Sociedad madrileña de Medicina Intensiva (SOMIAMA), Mario Chico, se pronunciaba tras el anuncio oficial Escudero de que no se contrataría más personal para el hospital. “No es posible que los intensivistas de otros hospitales madrileños puedan compaginar su trabajo con la asistencia en el nuevo hospital”. Denunciaba que los profesionales ya trabajan en turnos intensivos ante la situación actual y que no cabía una carga de trabajo mayor. El presidente del sindicato mayoritario de médicos en Madrid (AMYTS), Julián Ezquerra, calificaba este movimiento de “sinsentido”: “No hay plantilla suficiente para asumir los traslados ya que están muy, muy ajustadas, es un sinsentido abrir un nuevo hospital sin contrataciones y sin diálogo con nosotros”.

Ayuso ya protagonizó un momento televisivo cuando la periodista Silvia Intxaurrondo de Telemadrid le preguntó la procedencia del personal sanitario necesario para poner en marcha el hospital. La presidenta respondió, en un principio, de forma contundente: “Lo que se está viendo ahora mismo es el refuerzo que venga de otros hospitales y con ello hacer ese operativo para que el hospital, que está ya a punto de entregarse, tenga ya todo dispuesto”. La periodista pedía entonces aclaraciones sobre esta noticia, ya que el traslado de sanitarios supondría el desabastecimiento de otros centros, situación que ya se dio con el hospital de IFEMA. Entonces el discurso de Ayuso cambiaba a balbuceos y un visible nerviosismo como evasiva para dar más explicaciones sobre el asunto. Zanjaba la conversación, “son preguntas que no se le hacen a un presidente autonómico”, ante la perplejidad de Intxaurrondo.

Además, hay que tener en cuenta que este solo se trata de uno de los tres módulos que forman el centro, por lo que todavía no se conocen las cifras totales de personal que será necesario para cubrir todo el hospital. Expertos calculaban por las características del centro que serían necesarios unos 3.000 profesionales aunque Escudero aun no ha anunciado cifras oficiales. Los sindicatos defienden que es necesaria la contratación de nuevo personal para que el hospital sirva realmente como un refuerzo de la Sanidad madrileña y no como un coladero para otros centros sanitarios que ya están colapsados. “Seguimos insistiendo en que hay que contratar al personal que sea necesario. Hoy, la directora general de recursos humanos ya ha dejado caer que se valorará con los centros la posibilidad de llevar a cabo sustituciones de personal si es necesario”, explicaba Mariano Martín-Maestro, secretario de Acción Sindical de Sanidad de CC.OO. en Madrid.

De momento, el Hospital Enfermera Isabel Zendal ya ha costado medio millón más de las cifras que se anunciaron, 100 millones en lugar de los 51 que se suponían. Además, los sindicatos desconocen cómo se procederá a la adjudicación del resto de servicios que necesita un hospital para su funcionamiento, mantenimiento, limpieza, seguridad, lavandería y otros departamentos, que ya podrían haber sido adjudicados a empresas pero todavía se desconoce. “Veremos cómo se conceden. Imagino que se hará por la vía de urgencia, sin publicidad, y será adjudicado a los amigos de siempre”, señala Martín-Maestro.

El proceso de adscripción ha quedado abierto hoy tras una reunión con la Dirección General de Recursos Humanos y Relaciones Laborales de la Consejería y los sindicatos en la Mesa Sectorial. Se ha procedido a la publicación de la convocatoria y a su envío a las gerencias de los hospitales públicos madrileños.