El pasado domingo, el Gobierno decretó del Estado de Alarma en España con el fin de dar cobertura jurídica a la toma de decisiones más drásticas, para doblegar la curva de contagios en el país y conseguir una incidencia acumulada de 25 casos por cada 100.000 habitantes. Sin embargo, los datos notificados este lunes difieren mucho del objetivo a conseguir, ya que el Ministerio de Sanidad ha certificado 52.188 nuevos casos y 272 muertos desde el pasado viernes. La cifra de fallecidos dobla a las de los días anteriores y es la peor con diferencia desde la segunga oleada.

En las últimas 24 horas, el número de nuevos positivos llega a 5.217, con el País Vasco a la cabeza (891), seguido de Aragón (762), Cataluña (633) Galicia (597), Navarra (501), Madrid (370) y Extremadura (364). Estos números dejan una cifra total de contagios de 1.098.320 y una cifra de fallecidos de 35.031 desde el inicio de la pandemia. A su vez, hay 16.008 pacientes ingresados por coronavirus en toda España y 2.163 en UCIs. En las últimas 24 horas se han producido 1.584 ingresos y 734 altas.

“España está yendo muy claramente hacia arriba y nos tiene que preocupar mucho”, ha declarado el director del Centro de Coordinación de Emergencias y Alertas Sanitarias, Fernando Simón. “Prácticamente todas las comunidades autónomas están en una situación de riesgo muy alto, y las que no, a excepción de Canarias, están en un nivel alto”, ha subrayado.

La tasa de incidencia acumulada en el país ha ascendido a 410,18 casos por cada 100.000 habitantes. Simón ha explicado que la incidencia va aumentando progresivamente debido a que aún no se ha notado los efectos de las medidas puestas en marcha por las comunidades autónomas.

Tanto Fernando Simón como el ministro de Sanidad, Salvador Illa, han hecho hincapié en que la tasa de asintomáticos sigue siendo alta, por encima del 45%, y han subrayado que la detección precoz de estos casos “sirve de poco” si luego no se cumple el aislamiento. Siguiendo esta línea, Simón ha insistido en que si no se cumplen “escrupulosamente las cuarentenas” se llegará un problema que solo se puede solventar “imponiendo sanciones cuando se tengan que imponer”.

Situación crítica en las UCIs

A estos datos deben sumarse un 13,7% de ocupación hospitalaria y un 24,2% de ocupación de las UCIs del país, llegando a superar esta última el 40% en algunas comunidades. El viernes, estos mismos datos eran mucho más bajos: una incidencia del 361,66 por cada 100.000 habitantes y una ocupación hospitalaria del 12,11% y de las UCIs del 22,48%. Fernando Simón ha advertido que el aumento del 40% en las UCIs de algunas regiones está poniendo en “una situación realmente crítica a algún hospital”.

“No estamos aún en situación de colapso, pero sí tenemos una presión muy muy importante, con una situación realmente muy crítica en algún hospital. En algunos hospitales, además, se está poniendo en cuestión el funcionamiento rutinario, reduciendo gran parte de la actividad programada”, ha reconocido el epidemiólogo del Ministerio de Sanidad.

Simón ha comentado que el efecto de las medidas tomadas en las últimas semanas “todavía no se está observando” en las distintas comunidades, pero ha insistido en que España está “en el primer o segundo puesto” a nivel europeo que más pruebas realizan, con “un esfuerzo diagnóstico enorme”. De esta manera, se hacen 2.118 pruebas por cada 100.000 habitantes.

A su vez, ha querido señalar que dos o tres semanas es el margen que da Sanidad para estabilizar o bajar la curva. De lo contrario, el confinamiento podría ser inevitable sino se quieren revivir las imágenes de primavera.

Comunidades autónomas confinadas

Por su parte, algunas comunidades autónomas han optado por cerrar perimetralmente sus territorios, con el fin de evitar un confinamiento domiciliario y ser capaces de frenar la pandemia en el país.

Ya son cinco las regiones que han anunciado el cierre perimetral de su territorio: Aragón, País Vasco, Asturias, Navarra y La Rioja. Aragón restringe desde este lunes las entradas y salidas de la región sin un motivo justificado; Asturias también cierra su comunidad desde la noche del martes; País Vasco anuncia un cierre más estricto, limitando la movilidad al término municipal; y, por último, Navarra y La Rioja ya aplicaron la semana pasada el cierre completo de la comunidad, antes del decreto del estado de alarma, por lo que las salidas y entradas de ambas regiones están restringidas.

Por lo tanto, aún queda por ver si de cara al puente festivo del 1 de noviembre, más autonomías se suman a los cierres perimetrales y aumentan sus restricciones. Precisamente el puente es lo que más preocupa a la Comunidad de Madrid y también a Andalucía, dos regiones que han anunciado que estudiarán en las próximas horas si adoptan el cierre perimetral.

En este sentido, el consejero madrileño de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha comentado hoy que la Comunidad de Madrid está “valorando si se va a poder salir de Madrid este puente”, y que la decisión del Gobierno regional se conocerá a lo largo de la semana.

Otras dos comunidades que no descartan cerrar sus territorios son Castilla y León y Cataluña, donde ambos Gobiernos andan pensando si hacerlo en los próximos días.

Por su parte, Galicia, Cantabria, Extremadura, Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana, Murcia, Canarias y Baleares han señalado que no contarán con confinamientos perimetrales de cara al próximo festivo, por lo que descartan el cierre total de la comunidad por el momento, a no ser que la situación no presente ninguna mejora y siga empeorando notablemente en el país.

Europa con malas noticias

Europa tampoco cuenta con buenas noticias. El avance de la Covid-19 por el continente se encuentra en estos momentos fuera de control, lo que está obligando a numerosos países a establecer medidas restrictivas de horarios, actividades y movimientos que inevitablemente hacen pensar en un retroceso a la situación del pasado marzo, cuando se desencadenó la primera ola de la pandemia.

“Europa vuelve a ser epicentro de la enfermedad, pero aún podemos darle la vuelta a esta tendencia”, ha comentado el director de Emergencias Sanitarias de la OMS, Mike Ryan, quien ha pedido “mayores sacrificios” y tomar ejemplo de los países que han conseguido no tener nuevas oleadas de coronavirus.

España ya no es el país que peores datos presenta frente a la pandemia. Francia ha registrado 50.000 contagios en un solo día, casi los mismos que España en los tres días del fin de semana. Ha pasado a ser el país occidental más afectado y por ello, el presidente Macron ha puesto sobre la mesa la propuesta de un confinamiento total.

Italia, por su parte, ha duplicado la incidencia en tres días y ha decidido hasta el próximo 24 de noviembre el cierre de bares, restaurantes y otros locales del sector de la restauración a partir de las 18.00 horas.

En las últimas dos semanas los contagios se han disparado en Alemania, donde hasta ahora la pandemia tuvo efectos menos demoledores que en otros países europeos. El país no ha titubeado y ha decidido fijar cierres para Navidad. La canciller alemana, Ángela Merkel, se reunirá el miércoles con los poderes regionales para consensuar nuevas medidas.

La situación también es alarmante en Bélgica, que reducirá al mínimo necesario sus reuniones presenciales ante el empeoramiento de la situación sanitaria en toda Europa y particularmente en Bruselas, una de las ciudades más afectadas por esta segunda ola de la pandemia de coronavirus.