Se trata de una vacuna que tras meses de desarrollo en la Universidad de Oxford de Londres, perteneciente a la farmacéutica AstraZeneca, demuestra que no solo personas jóvenes podrían obtener una respuesta inmune robusta ante el virus por Covid-19, sino también, personas mayores. Lo cual es una buena notricia, ya que éste es el grupo de más alto riesgo ante la enfermedad, y por tanto el que más la necesita. Unas pruebas que concluyen que los hospitales de Londres esperan recibir las primeras unidades durante las primeras semanas del mes de noviembre. Un mes más tarde, trenta y un millones de dosis, serían distribuidas en España.

“Unos resultados que alimentan la evidencia sobre la seguridad y la respuesta inmunitaria”, según afirmaban fuentes de la compañía farmacéutica Astra Zeneca, que explicaron también que, los resultados se han dado durante los ensayos clínicos de la fase 2, y que cuentan con una tercera fase prototipo, que será probada en una población mayor.

Personal de la compañía farmacéutica ha explicado que la respuesta inmune obtenida en personas de avanzada edad con esta vacuna, es más que suficiente para prevenir y para evitar el agravamiento de salud por la enfermedad, suponiendo sin duda un avance significativo entre la población de alto riesgo. También señalan que la vacuna no estará disponible de manera masiva y global hasta el próximo año 2021, según ha aclarado el Secretario de Salud británico, Matt Hancock, que ha explicado que “queremos estar preparados por si todo va perfectamente. Pero todavía no estamos ahí”.

Para España, la comercialización de esta vacuna llegaría en diciembre, según las fuentes del Ministerio de Sanidad, ya que, el contrato de compra centralizada firmado de la Unión Europea con la compañía farmacéutica agilizaría los trámites. Por lo que, para nuestro país ya son los 31,5 millones los viales encargados al consorcio de Reino Unido, siendo los tres primeros millones para población de riesgo y personal sanitario. Un proceso de inmunización que al tratarse de una doble dosis, se tiene previsto que con una primera partida se pueda distribuir a más de 15 millones de personas, con un coste de dosis de 2,9 euros, euros de los que, 1,12 euros tendrían que ser abonados por la Unión Europea a través del fondo de apoyo de emergencias de la Comisión Europea.

Esta vacuna experimental desarrollada en Oxford, cuenta con una elaboración de una versión debilitada de un “adenovirus del resfriado común de los chimpancés”, un virus modificado que contiene información genética para este nuevo coronavirus, que entrena a nuestro sistema inmune ante el riesgo de sufrir la enfermedad por Covid-19. Unos ensayos clínicos que a principio de mes fueron interrumpidos por la farmacéutica AstraZeneca, ya que a pesar de ser uno de los más avanzados en el mundo, se detectó “una enfermedad potencialmente sin explicación”, en una de la personas voluntarias a probar la vacuna. Un suceso para el que el portavoz de la farmacéutica aseguraba que, dicha suspensión, era “una acción rutinaria que se lleva a cabo, mientras se investiga lo ocurrido, siempre que se observa una enfermedad potencialmente inexplicables”, en uno de los ensayos experimentales.