El niño de tres años sufre una úlcera de tercer grado en uno de sus ojos debido al lanzamiento de gel hidroalcohólico a los ojos por parte de uno de sus compañeros. Una situación grave que ha precisado hospitalización urgente, y para la que ya se tiene prevista una operación de transplante de membrana amniótica. Este tipo de intoxicaciones y lesiones por gel hidroalcohólico ya crecen en nuestro país un 90% desde que comenzó la pandemia por coronavirus
Un pequeño de tres años en la localidad pontevedresa de Latín ha sufrido un lamentable accidente debido al gel hidroalcohólico. Uno de sus compañeros, jugando, lanzó el gel al niño con la mala fortuna de darle en los ojos al menor. Esto le ha causado quemaduras y una úlcera de tercer grado en el globo ocular. Un episodio que ha llevado a la familia a denunciar al centro escolar, ya que el niño no fue trasladado inmediatamente a un centro de salud, sino que espero en el centro con las lesiones oculares hasta que llego la madre que se encontraba realizando la actividad habitual laboral a ocho kilómetros del colegio.
El pequeño ha acabado ingresando en el Hospital Clínico de Santiago, ya que presenta lesiones oculares en los ojos, y está previsto que se someta a una operación la próxima semana para realizarle un transplante de membrana amniótica.
La madre del menor ha contado en varios medios cómo vive la familia este triste episodio y afirma que su hijo está pasando muchos dolores lo que hace que en algunas ocasiones “grita de dolor”, por lo que esta teniendo que estar con una vía de suministro de cálmenles constante, además de que la abuela ha explicado que tras ser revisado por la doctora el niño apenas podía abrir el el ojo, ya que cuenta con úlceras de hasta un centímetro de grosor.
LOS EXPERTOS ACONSEJAN UN USO SUPERVISADO DEL GEL PARA MENORES DE 8 AÑOS
Según el Departamento gallego de Salud , los expertos apuntan a que el gel hidroalcohólico debe de estar supervisado en niños menores de 8 a 10 años, ya que alertan de que este tipo de geles contiene un alto contenido en alcohol etílico, lo que podría llevar a un riesgo de intoxicación de los niños en caso de ingerirlo, e incluso a quemaduras graves.
Por el momento, los familiares se mantienen centrados en el estado del niño y no han emprendido acciones legales contra el centro, pero sí han advertido del peligro de este tipo de geles entre los más pequeños, y han alegado que los mismos “no pueden estar al alcance de los niños, sobre todo, de pequeños de tres años y cuatro años, que no son conscientes del peligro que puede suponer”.
Ya se ha solicitado un informe a la Inspección sobre el hecho acontecido en el centro escolar, por parte de la jefatura territorial de Educación, pero por el momento se ha considerado que lo ocurrido ha sido un accidente fortuito.
En España, los expertos ya están empezando a alertar sobre el uso de gel hidroalcohólico y los niños pequeños, ya que los casos por intoxicación entre los más pequeños ya se multiplican por 9 este año en nuestro país, un estudio del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, ha demostrado que de los 585 niños intoxicados la mayoría era menor a los dos años, por lo que, este intoxicación ya asciende al 90% en referencia al año pasado, debido a la pandemia por Covid-19.
El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, a través de su cuenta de Twitter, ha dejado un mensaje claro debido a su preocupación como padre del uso de geles hidroalcohólicos entre los más pequeños en el que alerta del peligro, y de que la supervision es fundamental para frenar este tipo de intoxicaciones.
Más problemas para los alumnos: Llega el frío y las ventanas de los colegios seguirán abiertas
Nuestros estudiantes pasan cinco o seis horas en las aulas, lo que supone el 84% del tiempo total del que permanecen en el centro escolar.
Condiciones inadecuadas son las que se están empezando a presentar en las aulas debido a condiciones malas de temperatura y las altas concentraciones de CO2, además, nos encontramos con que muchos centros no cuentan con un mantenimiento adecuado, ya que algunos cuentan con ventanas que no abren para ventilar o persianas que no suben.
Un estudio de la Plataforma Edificación Passivhaus, junto a la Universidad de Burgos, a demostrado a través de 141.675 mediciones en 36 centros educativos de nuestro país que el
tener una mala ventilación provoca directamente el aumento del CO2,
lo que podría apuntar a una gran fuente de contagio por coronavirus en espacios cerrados,
“una mala ventilación de un aula, además de terminar una mala calidad del aire interior puede suponer una alta concentración de aerosoles potencialmente inefectivos que pueden favorecer la transmisión del coronavirus en clase”, ha expuesto Javier Pérez Soriano, técnico en prevención de riesgos laborales, en su informe.
Una situación por la que ya muchos se plantean como va a ser la ventilación de cara al invierno, ya que debido al frío el tener las ventanas abiertas el tiempo suficiente para la correcta ventilación llevaría a los estudiantes a pasar el tiempo en clase pasando frío y con el abrigo puesto, ya que según los datos del informe del estudio
“la recomendación de apertura de ventanas entre clase y clase durante cinco o diez minutos van a ser claramente insuficientes”.
Por lo que, bajo estas premisas ya se aboga por la ventilación como uno de los pilares en la lucha contra esta pandemia por Covid-19, junto a la mascarillas y el distanciamiento social, una serie de medidas que el epidemiólogo Quique Bassar, participe también del estudio ha declarado que,
“si lo perdemos habrá que reforzar las otras dos medidas y será mayor el riesgo que si ventilamos, pero si observas la historia de las pandemia y ves fotos antiguas, verás clases al aire libre, por mucho frío que hiciera, aunque eran otros tiempos”, ante estas palabras cada vez son más los expertos los que se están decantando por
“asumir un cambio de mentalidad: mientras dure la pandemia, va a ser habitual durante el invierno el uso de abrigos en interiores”.
Finalmente, ante esta situación no se ha dejado de poner en la palestra la falta de inversión en el sistema educativo, ya que en la actualidad encontramos centros que no cuentan con un mantenimiento adecuado, en el que encontramos ventanas que no abren y persianas que rotas que no suben, una serie de elementos que dificultan la ventilación del aula, y una situación que ya se compara con la Alemana, en la que ya ha anunciado que invertirá hasta 500 millones de euros en mantenimiento para mejorar la ventilación en centros públicos.