Cómo podemos prevenir el cáncer de mama, y como vencerlo sin secuelas. Hablamos de una tasa de supervivencia a la enfermedad que ya ha asciende a un 90% gracias a programas de cribado, un tumor frecuente entre mujeres, ya que una de cada ocho mujeres presentarán esta enfermedad a lo largo de su vida. Hoy es el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Mama.
Hablamos de una enfermedad que sobre todo afecta a mujeres y con la que se detecta cada quince segundos un nuevo caso en el mundo de este tipo de cáncer, ya que, y según datos estadísticos, una de cada ocho mujeres presentarán a lo largo de su vida, cáncer de mama. El tumor de mamas es sin duda el más frecuente entre personas del sexo femenino, un tipo de cáncer que cuenta con más de 33.315 nuevos casos en el Estado durante el 2019, y que supone la muerte de muchas mujeres que se encuentran en un rango de edad entre los 45 y 65 años.
Un gran porcentaje e incidencia de esta enfermedad que no cuenta del todo con datos alarmantes, ya que, las tasas de supervivencia no dejan de seguir subiendo con el paso de tiempo, llegando a crecer hasta el 90%, un gran porcentaje que sigue subiendo cada día gracias a resultados de tratamientos cada vez más eficaces, y a la detección precoz de la misma. Un gran paso que deja unos datos esperanzadores, ya que, una de cada 10 personas afectadas por la enfermedad seguirán con vida cinco años después de ser tratadas y diagnosticadas.
La detención precoz de esta enfermedad juega un papel crucial, ya que a través de los programas de cribado que se han puesto en marcha hace años en Europa se consiguen diagnosticar a tiempo el tumor para ser tratado. Cristina Saura, doctora y jefa de la Unidad de Cáncer de Mama del Departamento de Oncología Médica del hospital de la Vall d’Hebron, no ha querido desaprovechar la oportunidad de resaltar, no solo el elevado porcentaje de curaciones, sino también, los excelentes programas de cribado, “gracias a estos programas conseguimos diagnosticar el cáncer de mama en un estadio que es curable en la inmersa mayoría de los casos”, unos programas que se proponen cada día a mujeres de más de 50 años y que ya han sido comprometidos por esta pandemia por Covid-19. Una pandemia por coronavirus que ha interrumpido alguno de estos programas en este hospital barcelonés, y con los que la doctora a resaltado el gran esfuerzo de profesionales y oncólogos para llegar a ponerse al día con estas pruebas.
Asimismo, los especialistas hablan de una prevención de la enfermedad que sin duda pasa por un estilo de vida saludable, “una dieta mediterránea, no fumar, hacer ejercicio físico y la prevención del sobrepeso”, además de acogerse a los programa de detención precoz propuestos a mujeres de entre 50 y 69 años, unos programas que aun tienen mucho que mejorar, ya que el índice de asistencia a los mismos aún no es muy alto, siendo de un 60%. Además, los especialistas aconsejan el no dejar de ir al especialista a cualquier edad en el caso de notar cualquier cambio en la mama, ya que, “ésta sufre cambios fisiológicos en las distintas etapas del ciclo que no deben de asustarnos, pero sí debemos consultar con nuestro ginecólogo cuando notemos algún síntoma nuevo, como la aparición de un nódulo en el pecho o en la axila, un aumento del tamaño de la mama, cambio de color, una secreción no usual en el pezón, etc”. La autoexploración mamaria mensual es una herramienta muy buena avalada por los especialistas, ya que es la mejor forma de estar atentos a estos posibles cambios que puedan darse en la mama.
Por otro lado en cuanto al impacto emocional, la doctora Saura, explicaba que “el impacto emocional del cáncer de mama es muy grande. Las mujeres son muchas veces el motor de la familia, y la enfermedad acaba por afectar a todo su entorno”. Siendo uno de los momentos más sensibles, el del diagnóstico, las recaídas o la reincorporación al trabajo una vez pasado el tratamiento.
Psicooncólogos como el coordinador del Área de Bienestar Emocional de la Asociación Española Contra el Cáncer de Barcelona, Rafael Castell, ha recalcado también que sin duda el paso de esta enfermedad es un desafío emocional muy importante, resaltando la “importancia de recibir información de calidad y personalizada, sin caer en la intoxicación”. Unos momentos muy duros con los que Mar Carmona explicaba que “inicialmente es un golpe muy duro y se necesita tiempo para asumir la noticia”, pero que, una vez la hayamos asumido, se recomienda tomarlo “de la mejor manera posible, ya que no podemos hacer absolutamente nada para curarnos más que ponernos en manos de los médicos, así que al 100% de ánimos para lo que venga”.
Finalmente, la doctora ha concluido con un mensaje de ánimo para todas esas personas afectadas por la enfermedad, añadiendo que, “cáncer ya no es sinónimo de muerte, aunque demasiados casos no acaben bien. Necesitamos más recursos para investigación, para que todos los casos se puedan curar. Más investigación para más vida”.