El gobierno de la Generalitat adelantó este martes la adopción de una nueva batería de restricciones ante el grave aumento del índice de positivos en toda la comunidad, un crecimiento del 39% en la última semana. Grandes ciudades como Terrassa se acercan a los 500 casos por 100.000 habitantes y se alcanza un crecimiento de 338 puntos, muy por encima de la media recomendada de 100. Estas medidas se anunciarán hoy en una rueda de prensa y podrían suponer el cierre total de bares y restaurantes, que solo podrían abrir para repartir comida a domicilio. Desde el sector de la restauración estas noticias no han sido bien recibidas, denuncian una falta de comunicación por parte del Govern de unas restricciones que consideran “inadmisibles” y amenazan con llevarlas a los tribunales.
Cataluña podría volver a cerrar bares y restaurantes como en los peores meses de pandemia. El Govern de la Generalitat estudia nuevas medidas de restricción ante el preocupante aumento de casos durante la última semana. Los datos indican un crecimiento de los contagios del 39% en la última semana en todo Cataluña, en la capital de la región este crecimiento ha sido del 55%. Con estos índices el Ejecutivo ya adelantó ayer que se instaurarían nuevas medidas que serán anunciadas hoy en una rueda de prensa presidida por el president en funciones, Pere Aragonés. Algunas restricciones ya han sido confirmadas, como la suspensión de clases presenciales en universidades durante las dos próximas semanas, pero fuentes del Govern no han querido confirmar el cierre completo de la hostelería, que solo podría abrir para repartir comida a domicilio.
Cataluña había logrado mantener su índice de contagios estable hasta hace dos semanas después de controlar varios rebrotes en julio que obligaron a confinar zonas como l"Hospitalet de Llobregat. Ahora, la extensión del virus se ha generalizado en toda la comunidad, alcanzando una incidencia homogénea con 268 casos por 100.000 habitantes registrados en los últimos 14 días. Solo el lunes se registraban 1.265 nuevos positivos y 14 muertes, lo que da un crecimiento de 338 puntos, muy por encima de los 100 puntos en los que se tienen que mantener para considerar el brote como estable.
Zonas como Salt y Manlleu cuentan con una mayor incidencia que ya alcanza los 900 casos por 100.000 habitantes. Las grandes ciudades metropolitanas no se sitúan aun en datos tan elevados pero el número de contagios preocupa especialmente en estas zonas con gran densidad de población que se acercan rápidamente al umbral de 500 casos establecido por el Ministerio de Sanidad para tomar estrictas medidas. Ejemplos son ciudades como Terrassa que alcanza una incidencia de 423 casos o Granollers con 459 casos. Expertos en Salud Pública y Biología recuerdan que estas grandes ciudades suponen mayores dificultades a la hora de controlar los brotes, ya que es complicado establecer restricciones de movilidad y controlar el sistema de rastreo.
El Departamento de Salud, observando estas cifras, adelantó ayer una nueva batería de medidas. La más preocupante para los ciudadanos, el posible cierre completo de la hostelería que volvería a adoptar las medidas a las que se ciñeron durante los meses de confinamiento total. De esta forma, los bares y restaurantes solo podrían abrir para repartir comida a domicilio, pero no podrán albergar a comensales ni en el interior del establecimiento ni en terrazas. Hasta el momento, se habían adoptado unas medidas de reducción de aforo al 50%, además de la prohibición de reuniones de más de seis personas que tiene que seguir toda la ciudadanía.
Desde el sector hostelero estas noticias no han sido bien recibidas y acusan al Govern de no haberles avisado de unas medidas que no esperaban tan contundentes y que tachan de “inadmisibles”. El director del Gremio, Roger Pallarols, anunciaba una fuerte oposición por parte de todo el sector a esta posible restricción declarando que, si finalmente es confirmado, “se judicializará”. “El Gobierno tendrá todo el sector de la restauración en Barcelona al frente, tendrá una oposición frontal porque las familias de Barcelona no pueden aguantar más”, declaraba Pallarols que también denunciaba la falta de comunicación al sector que tenía previsto reunirse ayer con el Govern pero la Generalitat canceló el encuentro media hora antes.
“Nos sorprendió que por la noche se filtrará un titular tan grueso”, explicaba el director del Gremio que se enteró de la posible medida por la prensa. Además, desde este sector opinan que no es la restauración la encargada de aumentar los contagios y que deberían “buscar los verdaderos focos en otros espacios de socialización”. Sostienen también que esta medida solo provocará que las personas se reúnan en otros lugares en el ámbito privado. El Govern debate ahora con el Procicat, el comité que gestiona la pandemia, las nuevas posibles medidas que podrían confirmar este cierre de la hostelería.
Por el momento, el jueves se cerrará la actividad presencial en las universidades por, al menos, dos semanas y las Federaciones Deportivas de Catalunya ya anunciaron la suspensión de todas las competiciones los dos próximos fines de semana. El Govern también ha adelantado una petición a todas las empresas para que incorporen de nuevo a todos los empleados que puedan al teletrabajo con lo que pretenden aumentar este índice de un 8 a un 25%, reduciendo así la movilidad.
Las medidas serán anunciadas hoy mismo en una rueda de prensa que contará con la consellera y portavoz del Govern, Meritxell Budó, el conseller de Interior, Miquel Samper, y la consellera de Salud, Alba Vergés, así como el presidente en funciones. Se esperan medidas contundentes, incluso una posible declaración del estado de alarma que Budó no ha descartado. En principio estas nuevas restricciones estarán vigentes durante 15 días pero este periodo se podría ver aumentado si los indicadores epidemiológicos no se estabilizan en ese periodo de tiempo.