Publicado el 24 de septiembre a las 15:45
La multinacional estadounidense Johnson & Johnson ha anunciado que su vacuna contra el coronavirus, desarrollada por la empresa farmacéutica Janssen, ha entrado en su Fase III de desarrollo y podría obtener resultados a finales de este año. Para ello realizarán el mayor ensayo clínico hasta el momento en ocho países diferentes y reuniendo a unas 60.000 personas, lo que duplica los ensayos de otras vacunas que se encuentran en esta misma fase. Asimismo, la vacuna incorpora una ventaja clave en la lucha contra la pandemia ya que solo sería necesaria una única dosis para su efectividad. J&J planea producir mil millones de unidades para 2021 y empezar a distribuirlas cuanto antes a nivel internacional.
La multinacional Johnson & Johnson ha hecho un importante avance en el desarrollo de una vacuna efectiva para acabar con la pandemia del Covid – 19. La vacuna desarrollada por la compañía Janssen ha entrado en la fase final de su desarrollo antes de que puedan conseguir una licencia para fabricar y comercializar el fármaco. La empresa farmacéutica llevará a cabo el ensayo clínico más grande hasta el momento, siendo testada en unos 60.000 voluntarios que, calculan, tardarán en reclutar entre seis semanas y dos meses.
Esta se convierte así en la cuarta vacuna en entrar a la Fase III en Estados Unidos junto a las de Moderna, AstraZeneca y Pfizer. La vacuna de AstraZenca, la empresa farmacéutica con sede en Cambridge, permanece paralizada en Estados Unidos mientras se estudian dos casos trastornos neurológicos en pacientes que la recibieron. Mientras, Pfizer tomaba ventaja al resto el pasado martes cuando anunció que en octubre publicarían los primeros resultados de su Fase III. Moderna a su vez comunicaba que hasta la primavera del próximo año no podrán comprobar si su vacuna disminuye realmente los ingresos hospitalarios.
Con todo, la vacuna de J&J presenta ventajas con respecto a las anteriores. La principal es que estudian realizar una vacunación que sea eficaz para luchar contra el virus en una sola dosis. Hasta ahora, las farmacéuticas planteaban dos dosis para conseguir resultados, lo que dificultaría el proceso de distribución y vacunación, además de aumentar los costes. Expertos epidemiólogos apuntaban la enorme ventaja que supondría poder reducir la campaña de vacunación a una sola dosis para controlar el virus de la forma más rápida y efectiva. Además, la vacuna facilitaría la logística del transporte ya que no necesita ser congelada. Ahora en su Fase III probarán el fármaco en 8 países, Brasil, Perú, Estados Unidos, Sudáfrica, Argentina, Chile, Colombia y México. La compañía asegura en su comunicado oficial que serán inclusivos a la hora de seleccionar a las personas que recibirán la dosis y harán hincapié en aquellos sectores de la población que han sido especialmente castigados por la pandemia.
Janssen ha detallado que la vacuna se está desarrollando siguiendo la metodología que emplearon para desarrollar la del Ébola. Este método consiste en utilizar un adenovirus recombinante, responsable de causar los resfriados, y modificado, que sea capaz de causar una respuesta inmunológica en la proteína del coronavirus SARS-CoV-2. Los resultados preclínicos que se publicaron en la revista Nature mostraron que la vacuna impulsó respuestas de anticuerpos neutralizantes en macacos provocando una protección completa o prácticamente completa a la exposición del virus por nariz y pulmones.
Anthony Fauci, el director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) de Estados Unidos, apuntaba que el resultado que había dado el fármaco hasta el momento era “prometedor”. Recordaba también que es muy probable que sean necesarias distintas vacunas para poder cubrir toda la demanda mundial y que la existencia de cuatro fármacos en una fase tan avanzada de desarrollo tan solo ocho meses después de que comenzara la pandemia "es una azaña sin precedentes".
Según Paul Stoffels, el director científico de J&J, la farmacéutica con sede en Bélgica pretende producir hasta mil millones de dosis para 2021 y podría disponer de los primeros resultados a finales de este año o principios del siguiente. Para ello, es probable que empiecen la producción del fármaco antes de su aprobación por la Administración de Alimentos y Drogas de Estados Unidos (FDA). El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, celebraba esta noticia entre críticas, ya que muchos expertos epidemiólogos opinan que está instando a las farmacéuticas a llevar a cabo una carrera para conseguir una vacuna lo antes posible, lo que podría suponer un riesgo para la seguridad del fármaco.