Éste 16 de agosto tuvo lugar en la Plaza de Colón, en Madrid, la concentración negacionista de la Covid-19. Dicha concentración comenzó a las 18:00, hora prevista y autorizada, y finalizó después de las 19:00, hora de finalización confirmada por la delegación del Gobierno que no fue respetada. El acto fue impulsado por Fernando Vizcaíno, profesor de yoga valenciano, y artífice del canal de YouTube “Revelión en la granja”. Como era previsible, las medidas de distanciamiento social y mascarillas obligatorias si no es posible cumplir con la distancia, no se cumplieron.
De acuerdo a las cifras proporcionadas por la delegación, a la concentración acudieron entre 2.500 y 3.000 personas. Los participantes estiman el nivel de participación en más de 5.000 personas.
Por Iñaki Xabier Vélez Domingo
El motivo principal de la concentración, tal y como se podía leer en sus pancartas, y como dijera Vizcaíno en su canal de YouTube, es “exigir el término de las mentiras y las manipulaciones”. Otros gritos que se pudieron escuchar son “falsos tests, falsos PCR”, “el virus es el miedo”, o “televisión manipulación”. Vizcaíno, promotor de la actividad, sostiene en su canal que el virus ha sido inoculado a la población a través de la vacuna de la gripe, y que la pandemia es una “farsa orquestada por las élites gobernantes con la connivencia de los medios de comunicación para atemorizar a la ciudadanía, confinarnos y quitarnos nuestros derechos y libertades”.
El delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, ha declarado, en respuesta al comportamiento de los participantes en la concentración, que se sancionará “con la máxima dureza” el no usar las mascarillas en la plaza. La Delegación del Gobierno investigará los hechos acontecidos en la concentración y tomará las “medidas adecuadas”, tal y como ha anunciado en su cuenta oficial de Twitter. En el mismo tuit afirma que la concentración no se desarrolló de acuerdo a lo dispuesto por la Delegación del Gobierno.
El mismo domingo se impusieron 30 denuncias, de entre las cuales se encuentran los propios organizadores.