Publicado el 28 de julio a las 11:00
La Encuesta de Población Activa del segundo trimestre ha puesto negro sobre blanco la incidencia directa de la pandemia del coronavirus sobre el empleo. Según el INE durante este periodo se ha contabilizado 1.074.000 personas ocupadas menos, una caída fuerte pero que podría haber sido peor ya que no se cuenta aquí los afectados por un Expediente de Regulación de Empleo, la herramienta que puso en marcha el Gobierno para proteger precisamente el empleo. Estos trabajadores son considerados como ocupados según la metodología de la Organización Internacional del Trabajo. Por tanto, el número de ocupados que efectivamente han trabajado entre abril y junio es de casi 14 millones de personas, un 35,14% de la población activa.
Primero llegó la crisis sanitaria que hizo temblar los cimientos mismos de nuestro sistema de salud pública y después de la hecatombe llegó en forma de fuerte réplica otro seísmo que afectó directamente a la economía, la actividad y por extensión al empleo . Este martes, la Encuesta de Población Activa que realiza el Instituto Nacional de Estadística pone números concretos a la incidencia de la Covid-19 sobre el empleo y estima que la ocupación ha bajado en 1.074.000 personas . Se trata de una caída histórica nunca antes vista y que se explica tan solo por la llegada de la pandemia, detrás no hay una situación estructural y permanente, sino que estamos en el centro de la tormenta del coronavirus. A pesar de la fuerte caída, hay que tener en cuenta que podría haber sido pero sin la puesta en marcha de los ERTE’s , el instrumento que puso en marcha el Ejecutivo de Pedro Sánchez para proteger el empleo y a los trabajadores y trabajadoras.
Hay que tener en cuenta que la cifra de pérdida de ocupación no incluye a los afectados por un ERTE que, según la metodología de la Organización Internacional del Trabajo y de la Oficina Estadística de la Unión Europea (Eurostat) son considerados igualmente ocupados.
Sí se puede ver, en cambio, los estragos de la situación creada por la pandemia en otro tipo de ausencias al trabajo como los paros parciales por razones técnicas, incapacidad temporal, etc. Este se refleja en las horas efectivas de trabajo realizadas que han disminuido durante este periodo en un 22,59%.
Globalmente, la EPA arroja que en el segundo trimestre la cifra de ocupados (sin contar a los afectados por ERTE) fue de 13.901.000 personas lo que supone un 35,14% de la población de 16 años o más.
La especial situación se puede ver también en otro dato que llama la atención que es el número de trabajadores que realizaron su actividad desde su propio domicilio. El teletrabajo afectó a 3.015.200 personas , un 16,20% del total de ocupados.
Por su parte, el paro ha aumentado en 55.000 personas y la tasa de paro se sitúa en el 15,33% . En estas cifras, nuevamente, no se cuenta a los que perdieron su empleo y han pasado a clasificarse como inactivos que aumentan en más de un millón de personas. Este incremento de la inactividad se debe fundamentalmente al confinamiento y el cierre de empresas lo que ha impedido a 1,6 millones de personas a poder buscar empleo a pesar de estar disponibles para trabajar.
Los principales resultados de la Encuesta, por tanto, destacan que el número de ocupados ha bajado en más de un millón de personas respecto al trimestre anterior lo que sitúa la cifra global de ocupados (incluidos aquellos empleados afectados por un ERTE) en 18.607.200 personas . En términos desestacionalizados la variación trimestral es del -6,73%. Y en la variación anual de empleo ha bajado 1.197.700 personas.
La ocupación disminuye este trimestre en 22.000 personas en el sector público y en 1.052.000 en el privado. Respecto del mismo trimestre de 2019, el empleo se ha incrementado en 31.500 personas en el sector público y ha bajado en 1.229.100 en el privado.
Los asalariados disminuyen este trimestre en 1.033.300. Los que tienen contrato indefinido se reducen en 361.400 y los de contrato temporal en 671.900. En variación anual, el número de asalariados baja en 1.161.400, de ellos 232.300 con contrato indefinido y 929.100 con contrato temporal. El número de trabajadores por cuenta propia desciende en 36.100 este trimestre y en 34.600 en los 12 últimos meses.
La ocupación disminuye este trimestre en todos los sectores: Agricultura (–21.400), Industria (–127.000), Construcción (–108.700) y Servicios (–816.900). En el último año el empleo baja también en los cuatro sectores. En los Servicios hay 922.200 ocupados menos, en la Industria –122.300, en la Construcción –107.300 y en la Agricultura –45.900.
La bajada de la ocupación es general en todas las comunidades autónomas, excepto en Illes Balears, donde crece en 9,200 este trimestre. Los mayores descensos se dan en Cataluña (–223.700), Andalucía (–198.100) y Comunidad de Madrid (–184.400). En el último año, las comunidades autónomas que más reducen su ocupación son Andalucía (–226.800), Cataluña (–203.600) y Comunitat Valenciana (–140.600).