El pasado 18 de junio, Correos anunció el lanzamiento de su primer sello LGTBI con el fin de rendir homenaje a esta celebración mundial. De forma paralela lanzó una campaña de marketing con la imagen del sello y la tematización de varios buzones, furgonetas y la fachada de su sucursal en Chueca. En total invirtió 12.500 euros de una campaña que se ha hecho viral, en parte por las críticas recibidas por la ultraderecha. El nuevo sella ya es el segundo más vendido de la historia de la compañía solo por detrás del dedicado a Star Wars en 2017. Y la empresa ha recuperado la inversión en tan solo 24 horas
El próximo 28 de junio, como cada año, se celebra el Día del Orgullo LGTBI que en esta ocasión también será de forma virtual debido al coronavirus. Pero Correos ha querido rendir homenaje a esta celebración mundial con el lanzamiento de un sello especial y un ‘Paq Orgullo’ que incluye el sello, una bandera del orgullo, una postal prepagada y un abanico con un diseño que combina la bandera arcoíris con la famosa cornamusa de Correos. Tanto el sello como el kit están disponibles desde el pasado día 18 en la tienda online de correos. El diseño de este sello tan especial, cuyo valor postal será de 1€, hace alusión directa al Pasaje Begoña, que en 2019 fue declarado Lugar de Memoria Histórica y cuna de los Derechos y Libertades LGTBI.
De forma paralela, la entidad lanzó una campaña de marketing con el lema #NoSoloAmarillo y para la ocasión invirtió 12.500 euros en una acción comercial que amenaza con convertirse en la más rentable de su historia reciente gracias a… la ultraderecha de Abascal.
Tan solo un día después del lanzamiento de la campaña, las imágenes de las furgonetas, los buzones y el propio sello corrían como la pólvora por las redes sociales y, en parte, gracias a las críticas injustificadas del líder de extrema derecha Santiago Abascal a quien le ha salido el tiro por la culata.
El día 19 Abascal escribió uno de sus habituales tuits incendiarios con la intención y el propósito de hacer ver que lo que hacía Correos era poco menos que un delito. Su mensaje en las redes “no hay dinero para respiradores, ni para ERTEs ¡Gobierno Criminal!” tienen más de 16.000 compartidos y alrededor de 31.000 ‘me gusta’. Y su crítica ha ayudado a difundir la genial campaña de Correos.
Tal y como informa El Español en su canal de Invertia, Correos destinó el dinero de su campaña a vinilar nueve buzones de correos a un precio de 165 euros la unidad; decorar cinco furgonetas con un coste de 1.270 euros cada una y a repintar la fachada de su sucursal del barrio madrileño de Chueca lo que le ha costado unos 2.500 euros. En total, suma eso irrisorios 12.500 euros con el IVA incluido para una campaña discreta pero que se ha convertido en todo un exitazo. Fuentes del sector publicitario hablan de que para conseguir el impacto que ha conseguido Correos se precisa normalmente una campaña de más de 500.000 euros y la compañía lo ha conseguido con mucho menos.
Pero no solo Abacal ayudó a que se hiciera viral la campaña. Hay otros influencers la televisiva Sandra Barneda o la actriz Anabel Alonso que con sus compartidos han conseguido que Correos se haya convertido en ‘trending topic’ durante estos días.
La gran campaña comercial ha servido para que el sello y el ‘paq Orgullo’ sea también un éxito de ventas. En los primeros días, Correos ha conseguido más de 16.000 euros vendiendo estos productos lo que le ha hecho recuperar la inversión en un tiempo récord. El sello con los colores de la bandera LGTBI es ya el segundo más vendido de la historia solo por detrás del conmemorativo de Star Wars lanzado en 2017.