El precio del litro de gasóleo ha caido por debajo de la cota del euro por primera vez desde 2016, según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.

De esta forma, los carburantes continúan a la baja, acumulando ya un abaratamiento de más del 20% desde los máximos anuales alcanzados a principios de año.

En concreto, el precio medio del litro de gasóleo ha bajado un 2,25% con respecto a la semana anterior, situándose en los 0,999 euros, su nivel más bajo desde la primera quincena de agosto de 2016. No obstante, en gasolineras de varias comunidades autónomas ya era posible encontrar precios por debajo de esa cota del euro desde hace unas semanas.

En el caso del litro de gasolina, durante esta semana ha registrado un descenso del 1,8%, marcando un precio medio e 1,088 euros, en mínimos desde marzo de 2016.

Con respecto a los máximos anuales alcanzados en la primera quincena de enero, el gasóleo registra un descenso del 20,2%, mientras que en el caso de la gasolina el abaratamiento se sitúa en el 18%.

Al descenso de los carburantes se liga el desplome en el que se encuentra inmerso en los mercados internacionales el crudo, llegando a marcar, en el caso del Texas Americano, niveles históricos por debajo del cero.

Este jueves, el precio del barril de referencia para Europa, cotizaba por encima de los 24 dólares, mientras que el Téxas se situaba cerca de los 17 dólares.

A pesar de este desplome, los precios de los carburantes no guardan una relación directa con la cotización del barril en crudo, si no que dependen de las cotizaciones de la gasolina y gasóleo en los mercados al por mayor, todos ellos en dólares.

En España, la gasolina sigue estando más barata respecto a la media de la Unión Europea y la zona euro, donde el litro cuesta 1,172 euros y 1,230 euros, respectivamente, al mismo tiempo que el litro de gasóleo cuesta de media 1,089 euros en la UE y 1,117 euros en la eurozona. Esto se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria.