La pandemia del coronavirus que se originó en la ciudad china de Wuhan ha dejado a Alemania, en las últimas 24 horas, 3.380 casos nuevos y 299 fallecidos por coronavirus, lo que eleva el balance a 133.830 personas contagiadas y 3.868 víctimas, según el último balance del Instituto Robert Koch, la agencia gubernamental de Alemania que se encarga de realizar el seguimiento de las enfermedades contagiosas.
La región más afectada del territorio alemán es Baviera, que cuenta con 36.027 contagiados y 1.137 fallecidos, seguida por Renania del Norte-Westfalia, con 27.030 contagios y 726 muertos; Baden-Wuerttemberg, con 26.543 casos y 872 fallecidos; Renania-Palatinado, con 5.211 personas contagiadas y 92 víctimas mortales; y Berlín, la capital, donde hay 4.945 positivos y 84 muertos.
De esta forma, el Gobierno ya había anunciado este miércoles, 15 de abril, la prórroga de las medidas de restricción de movimientos hasta el próximo 3 de mayo, además de confirmar que pondrá en marcha un plan de flexibilización escalonada.
Este plan incluye las futuras reaperturas que se podrán llevar a cabo poco a poco. Por ejemplo, habla de la reapertura de librerías y otros comercios minoristas con locales de hasta 800 metros cuadrados de superficio a partir del lunes, 20 de abril. También los puntos de venta de automóviles y bicicletas se irán abriendo este lunes, según han informado fuentes gubernamentales a la agencia de noticias alemana DPA.
Las bibliotecas y los parques zoológicos y botánicos podrán abrir sus puertas, pero con estrictas medidas de distanciamiento interpersonal e higiene para disminuir los riesgos de contagio por el COVID-19.
Los servicios que requieran una mayor "proximidad física", como es el caso de las peluquerías, el Gobierno prevé su reapertura a partir del 4 de mayo y se llevará a cabo por medio del uso de equipos de protección personal.
En cambio los restaurantes, bares y pubs permanecerán cerrados, y los hoteles solo podrán otorgar sus servicios para "fines necesarios y expresamente no turísticos".
Respecto a las celebraciones religiosas en iglesias, mezquitas y sinagogas y las reuniones de otras comunidades religiosas seguirán prohibidas, según lo ha indicado el acuerdo entre el Gobierno federal y las autoridades locales.
Mientras, los colegios abrirán sus puertas también a partir del 4 de mayo, pero los eventos deportivos y culturales seguirán prohibidos hasta el 31 de agosto.