Más de 1,5 millones de trabajadores fueron suspendidos de sus puestos como consecuencia de la crisis desatada por el coronavirus. Las restricciones promovidas por el gobierno central español para frenar la propagación del virus en la sociedad, obligaron a miles de comercios, empresas e industrias a cerrar sus puertas.

Esto causó un fuerte impacto económico y obligó a muchos a optar por Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). Las empresas usan esta fórmula antes de empezar con los despidos. Las regiones turísticas son más afectadas por estas medidas, entre ellas Madrid, Murcia, Baleares y Canarias.

Desde que España se declarará en Estado de Alarma, las Administraciones han tramitado cerca de 200.000 expedientes. Solo en Cataluña hay 342.000 trabajadores con el empleo suspendido, y en Andalucía 280.000. Si bien no dio a conocer el dato de empleos afectado, Madrid informó que más de 15.000 empresarios iniciaron los expedientes. En Aragón el viernes pasado revelaron que había 3.307 trabajadores afectados por el ERTE. Según el Ministerio de Trabajo ya se tramitan los expedientes para 140.000 asalariados; en la Comunidad Valenciana se informó que lo mismo se hace para 120.066; y en Castilla y León para 101.765.

Según los cálculos entre el 12% y el 15% de los asalariados dados de alta en el régimen general de la Seguridad Social en febrero se habrían visto incluidos en un expediente de suspensión laboral. Esta semana de El Corte Inglés informó que presentará un ERTE para 22.000 empleados, situación que se repite en miles de empresas locales. El Gobierno proyecta que unos dos millones de trabajadores se verán afectados.