En Madrid y Alicante la Policía detuvo a cinco portadores de coronavirus que se habían fugado de los centros sanitarios y han vuelto a ser ingresasos. La Policía debe reconstruir el recorrido de cada uno para saber con quienes estuvieron en contacto. Por otro lado, aún quedan algunos que dieron positivo en la prueva del Covid-19.
La pandemia del coronavirus no da tregua y la irresponsabilidad de muchas personas sorprende, tal es el caso de los infectados que escapan de los hospitales sin recibir el alta. Sin saberlo, en algunos casos, estas personas están colaborando con la propagación del COVID-19 y sus consecuencias. Actitudes como estas dejan en evidencia la falta de compromiso y la inconciencia que todavía tienen muchas personas ante una de las crisis sanitarias mundiales más importantes de la historia.
La Policía ya informó la detención de cinco pacientes con coronavirus que habían huido de diversos hospitales. Además, recalcó que todavía hay fugados que no han sido localizados. El director adjunto de la Policía, José Ángel González, alertó ayer sobre “la actitud irresponsable de estos pacientes, que están obligando a los funcionarios a llevar a cabo investigaciones policiales, no solo para localizar a los fugados, sino también, y especialmente, para seguir su trazabilidad”.
Los agentes trabajan para recomponer el circuito de cada uno de los pacientes desde la salida del hospital. De esta manera se busca determinar qué otras personas han podido ser contagiadas, para concretar su aislamiento.
El Hospital Severo Ochoa de Leganés, en Madrid, fue el nosocomio donde se registró la fuga más importante de pacientes. Durante el fin de semana pasado el centro colapso su capacidad debido a la llegada masiva de nuevos pacientes sospechados de ser portadores del COVID 19. En ese momento, cuatro personas, que ya habían dado positivo al test, se marcharon antes de ser hospitalizadas o derivadas a sus domicilios en estado de cuarentena.
Esta situación fue comunicada inmediatamente por el equipo médico a la Policía. Ante la denuncia se montó un operativo que permitió localizar sin problema a los huidos. Tres de ellos serán sancionados por conducta negligente, y por poner en riesgo la salud colectiva. El cuarto era un anciano al que se localizó desorientado en la calle y al que los agentes llevaron de vuelta al hospital de Leganés. Estos casos obligaron a la fuerza policial a montar un punto de control en el Hospital de Leganés para evitar nuevas fugas.
La quinta fuga se registró en el hospital IMED Levante de Benidorm. Allí un hombre de ochenta años decidió marcharse a su casa sin el alta. Cuando salió del hospital cogió un taxi. La Policía no tuvo problemas para localizar al octogenario en su domicilio, pero para encontrar al conductor del taxi y ponerlo en cuarentena se han tenido que montar operativos en toda la ciudad. Ahora se trabaja en identificar a todas las personas con las tuvo contacto que el conductor para ponerlas en cuarentena y evitar que el COVID-19 continúe propagándose.