Bares, peluquerías y restaurantes deberán echar el cierre a partir de este jueves. Italia ha dado un paso más para tratar de frenar la epidemia de coronavirus y ordena el cierre todas las actividades comerciales salvo los supermercados, farmacias y parafarmacias. Se trata de las medidas más severas y drásticas desde la II Guerra Mundial.
Italia se ha acercado un poco más al sistema de aislamiento que ha estado implantado la ciudad china de Whuan, lugar donde comenzó el brote de COVID-19 y ha decidido endurecer sus medidas y restricciones.
Guiseppe Conte, primer ministro italiano ha anunciado a través de un video retransmitido en directo en sus redes sociales que decretará el cierre este próximo jueves de todas las actividades comerciales exceptuando farmacias, parafarmacias y supermercados. En esta medida entran en el cierre los bares, restaurantes, centros de estética, peluquerías y otro tipo de negocios que reúnen las mismas características en los que no se ofrezcan bienes de primera necesidad.
Conte ha especificado que permanecerán cerrados todos los bares y restaurantes, aunque se permitirá el servicio de envío de comida a domicilio, y también ha insistido en que se clausularan las peluquerías. Estos negocios se sumarán a los ya cerrados en los últimos días, como teatros, museos, cines, escuelas, institutos y universidades. Sin embargo, se garantizarán los servicios públicos como el transporte, bancos, aseguradores y postales, y se mantendrá en marcha la actividad agrícola.
“Italia siempre será una zona única, una zona protegida. Nos disponemos a cerrar toda la actividad comercial, la venta minorista, excepto los negocios de primera necesidad y farmacias”, indica el primer ministro italiano en el vídeo, en el que añade: “No es necesario salir corriendo al supermercado a hacer la compra; si todos respetan estas reglas, el país saldrá antes de la emergencia” .
El primer ministro ha agradecido a los ciudadanos la colaboración de todos los que están respetando las restricciones adoptadas por el Gobierno para contener la expansión del virus, “aunque no está siendo fácil porque está cambiando los hábitos de vida y está suponiendo muchos sacrificios”.
Asimismo, ha explicado que para tener una respuesta positiva a estas medidas, habrá que esperar “un par de semanas” y que este último paquete de restricciones es “un paso necesario más para la contención de la enfermedad”.
Angelo Borrelli, jefe de Protección Civil, ha anunciado esta misma tarde en una rueda de prensa que el numero de contagiados por la enfermedad ha aumentado en las ultimas 24 horas a 12.462, cuando este martes eran 10.149, lo que ha provocado una subida de 2.213 casos. Además, ya son 827 fallecimientos frente 631 de ayer, lo que equivale a un 31% más.
Italia, ha subrayado Conte, “está en dificultades”, pese a lo cual "está dando muestras de una gran resistencia” ante la pandemia, declarado así el brote de coronavirus por la Organización Mundial de la Salud este miércoles.