La región ha registrado un total de 33 homicidios este año, la mayoría por apuñalamientos, entre ellos 7 asesinatos machistas, 6 por robos y 2 descuartizamientos, según datos provisionales. El último crimen de este año tuvo lugar en el barrio madrileño de Puente de Vallecas, donde un hombre de 23 años y de nacionalidad española fue apuñalado, por lo que la policía sigue buscando al autor o autores de los hechos.
La región ha registrado un total de 33 homicidios este año, la mayoría por apuñalamientos, entre ellos 7 asesinatos machistas, 6 por robos y 2 descuartizamientos, según datos provisionales.
Este año 2019 acabaría como uno de los ejercicios con menos crímenes de la serie histórica, dentro de la tendencia del descenso de este tipo de delitos en la década. En 2011, hubo 42 homicidios , 47 en 2012, 37 en 2013, 40 en 2014, 30 en 2015, 33 en 2016, 39 en 2017 y 36 en 2018.
De los crímenes de este año siete de ellos pertenecen a territorio de la Guardia Civil, todos esclarecidos menos uno; y el resto de Policía Nacional, gran parte de ellos también resueltos. Hubo oficialmente siete asesinatos machistas, dos descuartizamientos, seis crímenes por robos y cinco por disparos.
El 3 de enero, en Leganés, un hombre de 87 años fue hallado muerto de forma violenta al ser golpeado en la cabeza durante un robo en su casa. La Policía detuvo al presunto autor del primer crimen, un colombiano con 18 antecedentes.
En las mismas circunstancias acabó el dueño de una pensión de la calle Arriaza de Madrid, cerca de Príncipe Pío. El hombre, de 86 años, fue asesinado con violencia extrema el 17 de enero por oponerse al robo de la recaudación.
El crimen más inexplicable del año ocurrió en enero. Una joven llamada Miriam, de 25 años, fue hallada muerta con más de 90 puñaladas en un paraje de Meco. La Guardia Civil detuvo a Sergio, novio de su amiga y compañero de piso, pero hace unos días fue puesto en libertad condicional por falta de pruebas contundentes sobre su implicación en los hechos.
En febrero de este año, la Policía Nacional encontró el cuerpo descuartizado de una mujer, desaparecida desde 2017, en un frigorífico dentro de una vivienda de Alcalá de Henares. Su pareja fue detenido, quien llegó a comerse parte del cadáver.
El 9 de febrero fue hallado el cadáver de un bebé, que había nacido con vida, en un contenedor de basura de Carabanchel. El 18 del mismo mes un hombre asesinó a su padre y a su tío con múltiples puñaladas en Colmenarejo y luego se quitó la vida tirándose por una azotea de la madrileña Plaza de Castilla.
Uno de los crímenes que más repercusión tuvo en 2019 fue el asesinato en marzo de Francisco D.C. por una simple pelea con un perro en el Pozo del Tío Raimundo. El asesino se entregó días después en una comisaría. Se trata de "El Chule", un joven de 20 años, miembro de un conocido clan gitano de la zona.
El 14 de abril un joven mató a otro de un disparo dentro de una discoteca en Aluche. La Policía sospechó desde un principio de una pelea entre bandas latinas y en agosto detuvo en Barcelona al posible autor, un joven perteneciente a los Dominican Don"t Play (DDP).
El cuarto caso de violencia machista ocurrió a principios de mayo en Parla, en el que una mujer fue hallada muerta en su casa. Tenía una orden de alejamiento de su exnovio, que fue detenido en Ceuta casi medio año después.
El 10 de junio un hombre se atrincheró en su vivienda después de matar a tiros desde la ventana de su casa de Aranjuez a dos cuñadas y herir a su suegra, que paseaban por la calle. Finalmente fue detenido y confesó en comisaría que las disparó porque su mujer, hermana de las fallecidas, se había separado de él.
A finales de julio apareció el cadáver de un hombre de 37 años con heridas de arma blanca en el cuello, en esta ocasión hallado entre dos contenedores de una calle del madrileño barrio de Salamanca. Actualmente, no se descarta un ajuste de cuentas.
Otro asesinato machista ocurrió en agosto en Tetuán. Un hombre presuntamente mató a su pareja, de 47 años, en un piso de la calle Tenerife. Había sido atada de pies y manos y apuñalada con un gran cuchillo. Su cadáver presentaba además fuertes golpes en la cabeza. Luego, el asesino mandó mensajes amenazantes a otra antigua relación. Fue detenido días después gracias a la colaboración ciudadana.
El sexto asesinato machista ocurrió en septiembre en Ciudad Lineal. Un hombre de 42 años mató a su pareja, de 31 años, en plena calle y delante de sus dos hijos. La víctima le había denunciado cuatro veces por maltrato desde 2017. Finalmente, fue detenido.
El 15 de septiembre un joven de 20 años perdió la vida víctima al chocar con el turismo de un conductor kamikaze que circulaba en sentido contrario y triplicando la tasa de alcoholemia por la M-50. El juez le ha imputado un delito de homicidio imprudente.
El 11 de octubre, un hombre de origen chino murió tras ser acuchillado para robarle en su tienda en Vicálvaro. Un día después otro hombre de origen magrebí falleció apuñalado en una pelea cerca de La Cubierta de Leganés.
Otro de los crímenes más impactantes del año tuvo lugar en Valdemoro. Un joven "carnicero tatuador" colombiano fue arrestado por la muerte de una adolescente de 18 años, a la que presuntamente descuartizó, arrojó su cabeza en una zona de matorrales y trató de quemar su cuerpo.
El 23 de octubre apareció el cadáver de un toxicómano detrás del metro de San Cristóbal de los Ángeles. La autopsia reveló que murió asesinado a golpes. De la misma forma falleció a principios de noviembre un tapicero en su tienda del Paseo de la Extremadura. El móvil del homicidio fue el robo y el autor fue detenido poco después.
Ya el 19 de noviembre un taxista murió degollado por un cliente en Alcalá de Henares para robarle la recaudación. Un día después una mujer búlgara de 69 años murió degollada por su hijo, de 30, que fue arrestado posteriormente. A finales de noviembre, una mujer de mediana edad fue encontrada en avanzado estado de descomposición envuelta en una funda de colchón en una escombrera del polígono Marconi. Los análisis efectuados han determinado que murió de forma violenta. Otro asesinato de violencia machista en noviembre, Alexia, una mujer de 38 años, fue hallada muerta por los servicios de emergencia. Su reciente pareja, José Luis, fue detenida y se encuentra en la cárcel a la espera de las pruebas toxicológicas que confirmen el asesinato.
Ya en diciembre, el día 16, una mujer de 79 años y un hombre de 80 fueron asesinados a puñaladas y degollados en su domicilio del madrileño barrio de Tetuán. La Policía baraja que se vieran implicados en un robo por parte de ladrones muy violentos.
El último crimen de este año tuvo lugar en el barrio madrileño de Puente de Vallecas, donde un hombre de 23 años y nacionalidad española fue apuñalado hasta la muerte. La Policía sigue en busca del autor o autores de los hechos.