Una operación especial de limpieza intenta borrar desde primera hora del sábado las consecuencias de cinco noches de disturbios extraordinariamente violentos en Barcelona y las demás capitales catalanas. La más cruda, la de este viernes, se desataba tras la masiva manifestación en el centro de Barcelona como protesta por la sentencia del "procés", con más de medio millón de asistentes según la Guardia Urbana. Los disturbios se empezaron a descontrolar a la altura de Via Laietana, donde los Mossos tuvieron que utilizar, por primera vez, un camión de agua para abrirse paso entre las barricadas de fuego.
Noche infernal fue la vivida en Barcelona y otras capitales catalanas este pasado viernes. Hasta el momento hay 83 detenidos en toda Cataluña y 182 personas (152 en Barcelona) que han sido atendidas por los servicios sanitarios, según los datos facilitados este sábado. De ellas, al menos un centenar son agestes de Policía y Mossos. El president de la Generalitat, tras haber instigado a los CDR a apretasr los enfrentamientos, cortes de carreteras, etc, y acudir el mismo a uno de ellos, ha comparecido con cara de compungido sin terminar de condenar la violencia y con expresiones huecas que no asumen ninguan responsabilidad sobre las batallas campales que están sucediendo en Barcelona desde el pasado lunes. La violencia nunca ha sido ni será nuestra bandera", dice contradiciendose a si mismo y a los acontecimientos.
El ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska estuvo reunido con el Consejer de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, en Barcelona y posteriormente se dirigió al hospital a visitar y dar ánimos y agradecimiento al algunos del centenar de policías y mossos heridos. El Departamento de Salud ha indicado que, a consecuencia de los incidentes de los últimos días, hay 19 personas hospitalizadas: En el hospital Vall d"Hebron hay una persona muy grave con un traumatismo craneoencefálico y otra en estado leve; en el hospital Sant Pau permanecen ingresadas una persona menos grave, otra que ingresó el día 16 y evoluciona favorablemente y cinco más en estado grave; en el hospital Sagrat Cor hay una persona grave, otra menos grave y una tercera leve; en el Clínic de Barcelona permanece una persona en situación estable y hay otra en estado menos grave en el hospital del Mar; en el hospital Josep Trueta de Girona hay dos personas en estado grave; en el Joan XXIII de Tarragona permanecen ingresadas una persona grave y una menos grave; y en el hospital de Sant Pau y Santa Tecla hay una persona menos grave.
"La violencia nunca ha sido ni será nuestra bandera"
"Esto no puede seguir así, Barcelona no se lo merece", ha señalado la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, quien no ha acudido a la reunión que ha tenido lugar en el palacio de la Generalitat entre el presidente Quim Torra, el vicepresidente Pere Aragonès y los alcaldes de Lleida, Tarragona y Girona, todos ellos independentistas. La propia Colau pedía este viernes al vicepresidente una convocatoria amplia y unitaria, de instituciones y sociedad civil, para rechazar la violencia.
"Hace mucho tiempo que pedimos un proceso de negociación para la resolución política al conflicto político. Hoy es más urgente que nunca", ha requerido Aragonés tras la celebración de la reunión.
Por su parte, Torra ha puesto en valor al "movimiento independentista" que, bajo su criterio, "ha sido masivo, transversal, ético y pacífico. Ayer, las confluencias de las marchas por la libertad constituyeron la mejor expresión de nuestro movimiento. La violencia nunca ha sido ni será nuestra bandera".
"Hacemos una llamada a la responsabilidad. No nos representa ninguna forma de violencia. Nos representa la democracia. Exigimos al Gobierno del Estado abrir un dialogo para una solucion democrática, para una salida política y democrática", ha requerido.