La tarde de este miércoles, en la sede de UGT en Madrid, Íñigo Errejón dará los detalles de su vuelta a la política nacional después de que las bases de Más Madrid decidieran este pasado fin de semana que debían presentarse a la repetición electoral del próximo 10 de noviembre. Aún no se sabe qué nombre tendrá el nuevo partido, si así se configura, o la posible asociación electoral. Muchos apuestan por que en la papeleta electoral aparecerá “Más País”. Tampoco se sabe nada de las circunscripciones en las que se presentarán, aunque está casi descartado que lo hagan en todo el territorio. Posiblemente estarán en 12 o 13 provincias, aquellas en las que se reparten más escaños, donde sea factible conseguir representación y donde no dividan el voto que perjudique finalmente al bloque de la izquierda. El objetivo es hacerse con más de quince escaños o obtener cinco escaños y más del 5% de votos a nivel nacional. Es el requisito que hay que cumplir para poder tener grupo parlamentario propio en el Congreso de los Diputados. De no conseguirlo, irían directamente al Grupo Mixto donde no tendrían la visibilidad ni la fuerza parlamentaria que precisan.

A pesar de las dudas que aún faltan por resolver el proyecto político de Errejón ya cuenta con apoyos en diferentes regiones. Compromís, en Valencia, ha aprobado en sus órganos internos ir de la mano de Más Madrid a la repetición electoral. Lo mismo ocurre en Aragón con la Chunta y en Galicia con En Marea. Al mismo tiempo que Errejón gana adeptos los pierde Pablo Iglesias que está viendo como la reconfiguración de la posición de las confluencias le está restando fuerzas a toda velocidad.

La Chunta Aragonesista ya está en conversaciones con el partido que lidera Errejón y será este viernes cuando decidan su postura de cara a las elecciones. También siguen en contacto con responsables de Podemos y de IU en la región, pero afirman que “no hay nada cerrado”. Lo que sí reconocen es que hay “más simpatía” hacia el proyecto de Errejón que al que lidera Iglesias.

En Valencia, dirigentes de Compromis consideran que el “paso sensato” pasa por confluir con Íñigo Errejón para “dar un nuevo aire a la política española”. El pacto de Gobierno que el partido valeciano tiene con el PSOE y con Podemos que les mantiene en el Gobierno de la Generalitat Valenciana no es obstáculo para que ahora se decanten por confluir con Más Madrid en las elecciones generales.

El presidente de Las Cortes Valencianas, Enric Morera, destaca que la decisión de la Ejecutiva es unánime y ha anunciado que “en Madrid se llamará Más Madrid” pero que en la Comunitat la confluencia llevará el sello de Compromís. Además, ha afirmado que “será una fórmula cooperativa, incluso federal o condederal”.

En Galicia, el portavoz de la formación, Luis Villares, asegura que sería “positiva” una cooperación “leal y horizontal” de su partido con el movimiento que lidera Íñigo Errejón.

Villares considera que "interlocutores" como los que pueden "nacer a partir de estas elecciones", como el caso de Más Madrid, Compromis o "otras fuerzas" con las que En Marea tiene "afinidades", pueden "facilitar y mucho la implantación de una agenda política gallega en el Estado y de una agenda social que amplíe libertades y derechos".

"Nosotros estamos preocupados por tres emergencias: la emergencia feminista, la emergencia climática y la emergencia social y, por tanto, son tres ejes en los que podríamos entendernos perfectamente con otras fuerzas políticas del ámbito estatal en una cooperación leal y horizontal", ha apuntado.

En Galicia se podría dar la vuelta a la arena política de otra dirigente que salió de Unidas Podemos enfrentada con Iglesias. Se trata de Carolina Bescansa, una de las fundadoras de Podemos. "Creo que Bescansa es un activo político valioso y una persona que aún tiene mucho que decir en política", ha manifestado Villares para subrayar en que Más Madrid aún debe decidir si se presentan en más comunidades que en la Madrileña.

En Madrid, se especulaba con la vuelta de la ex alcaldesa de la capital Manuela Carmena a la política. Pero ella misma se ha descartado. Eso sí, ha expresado que pondrá “todo lo que pueda” para aportar al nuevo proyecto. Carmena ha destacado que “"pueda haber una alternativa diferente" en la que "valores tan importantes como el ceder, ponerse en el lugar del otro, buscar los objetivos comunes" estén por delante "en un momento en el que había como una desolación grande".

"Todo eso son los elementos positivos que hacen posibles los acuerdos, el diálogo... Ya sabéis que eso es lo mío y por supuesto que en esa medida procuraré poner de mí todo lo que pueda", ha explicado.

Sin embargo, hay otros territorios en los que aún no está asegurada la presencia de Más Madrid en los comicios del 10-N. En Canarias, por ejemplo, esta semana se daba a conocer la iniciativa Más Canarias, pero desde Madrid han rechazado ya que esta plataforma tenga algo que ver con ellos. "No hemos tenido contacto con José Manuel Corrales ni con nadie de ellos, no sabemos nada de esta plataforma y no es cierto que hayan mantenido contacto ni con Errejón ni con su círculo cercano para montar ninguna sucursal de Más Madrid", han recalcado.

En Cantabria, Podemos se presentará en coalición con Izquierda Unida y Equo con el objetivo de recuperar los apoyos perdidos que hizo que no consiguieran representación el pasado 28 de abril. Este anuncio deja casi sin opciones a Más Madrid de poder presentarse en esta Comunidad. Lo mismo puede ocurrir en Euskadi y Cataluña donde el grado de cooperación entre Unidas Podemos y las confluencias es muy fuerte y no corre peligro de ruptura.

En Asturias, los de Errejón consideran que pueden alcanzar un buen acuerdo con la formación liderada por Gaspar Llamazares y en la que participa el ex juez Baltasar Garzón. En las pasadas elecciones se presentaron bajo la denominación de Actúa y no ven con malos ojos una coalición con Más Madrid.

La reconfiguración del espacio a la izquierda del PSOE no ha dejado indiferentes a otros partidos. En las filas socialistas consideran por un lado que la irrupción de Errejón puede suponer el revés definitivo para Pablo Iglesias que podría ver reducida en gran medida su fuerza parlamentaria en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, también tienen el temor que Errejón consiga quitar votos al PSOE. Tras las elecciones, los dirigentes socialistas consideran que una posible negociación con el nuevo partido sería mucho más fácil que lo que ha sucedido con Unidas Podemos.

En el bloque de la derecha, donde se sitúa el Partido Popular, Ciudadanos y la ultraderecha de Vox, creen que la división de la izquierda es bueno para sus expectativas electorales. Pero consideran que una oferta más en el bloque de izquierdas podría movilizar a un sector del electorado que hasta ahora se situaba en la abstención.